Mostrando entradas con la etiqueta nazis en Argentina. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta nazis en Argentina. Mostrar todas las entradas

lunes, 29 de julio de 2013

Operación Exterminio

"Historias Lado B" inicia, con la publicación de este informe, una fructífera y productiva colaboración e intercambio de material con "Astrolabio del Tiempo". Desde ahora los dos sitios compartirán regularmente notas y artículos de interés en común que significarán sin lugar a dudas un importante valor agregado para los dos espacios dedicados a la investigación de la historia. 


“A través de la diseminación de tal terror toda disposición de resistencia entre el pueblo, será eliminada”
Adolf Hitler, diciembre de 1941.

El origen del mal.
Al finalizar la segunda guerra mundial, Europa había quedado desvastada. Las bombas arrasaron ciudades completas, dejando como testigos algunos muros, que alguna vez supieron ser edificios y casas. La miseria y el estupor acompañaron a los sobrevivientes; millones de personas habían muerto y otras tantas estaban desaparecidas pero el horror mas grande fue el descubrimiento de los numerosos campos de exterminio que los nazis habían instalado para lo que ellos llamaron la “solución final”.
Como muertos en vida los sobrevivientes de aquel holocausto caminaban atónitos detrás de las tropas aliadas que habian vencido a los nazis.
El mundo entero no era el mismo de siempre, el escenario político,económico y social daría un giro tan sorprendente y paradójico que las páginas de la historia seguirían horrorizándose muchas décadas más adelante.
La “bestia” no había muerto, por el contrario el mal seguiría haciendo de las suyas y contando con aliados que les facilitarían su accionar.
Las consecuencias de la guerra fueron numerosas, entre los aliados se encontraban las nuevas potencias que manejarían al mundo siguiendo un minucioso plan.
Como cuenta Carlos De Nápoli en su libro Nazis en el Sur; ”Los Estados Unidos en posesión de la bomba atómica y una economía cuya fortaleza no tenia parangón en la historia, buscaban finalizar cuanto antes la contienda en Europa y Oriente para comenzar a comercializar agresivamente su producción en los enormes mercados que ahora tenia a su disposición.
La Unión Soviética de Stalin, que había soportado años de ocupación nazi se debatía por obtener la mayor tajada posible de territorios europeos, por expandir su sistema político y, sobre todas las cosas, por conseguir salidas francas al Atlántico y al Mediterráneo. Con intereses dispares, desde mucho tiempo antes los Aliados eran un grupo de enemigos mortales unidos por un aparente enemigo común: Adolf Hitler.”
Como un ave fénix, los Estados Unidos de América, se levantaba entre tantos muertos y se hacía acreedor del poder económico de otras naciones y los Rusos por su parte no se quedaban atrás.
Se habían convertido en “aliados” por poco tiempo, ya que inmediatamente después de la guerra, se declararon fanáticos enemigos, y dividían al mundo en dos.

Estados Unidos, se puso a la cabeza y se convirtió en el “proveedor “y en el “ordenador”. Su plan se ejecutó rápidamente. En abril del año 1945, a pocos días de haber finalizado la guerra, los países vencedores decidieron en la Conferencia de San Francisco (en la ciudad estadounidense), la creación de un nuevo sistema de seguridad cuya pieza central fue la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Los objetivos de esta organización eran la defensa de los derechos de las personas, el mantenimiento de la paz, la libre determinación de los pueblos y el fomento de cooperación entre los pueblos.
Tres años después la ONU, redactaba la Declaración Universal de los Derechos Humanos, cuyos postulados básicos eran el respeto por la vida, la libertad y la igualdad de las personas.
El mundo volvía lentamente a su lugar, creyendo que por fin había llegado la paz, pero lejos estaban de pensar que esos postulados iban a convertirse en poco tiempo en una hipócrita farsa.
A Estados Unidos lo que más le interesaba eran sus propios intereses y no dejaría que nada ni nadie les sacara el protagonismo de convertirse en una flamante potencia que había salido fortalecida tras el resultado de la guerra y la Unión Soviética, por su parte, también respondería a sus propios intereses.
La historia y los hechos se encargaron entonces de demostrar que lo que menos les interesaba era la libre determinación de los pueblos, el respeto por la vida, la libertad ni la igualdad de las personas.
Durante los primeros años de la postguerra se habían realizado numerosos acuerdos y pactos. Entre ellos varios países acordaron que entre noviembre de 1945 y octubre de 1946, se realizaría en la ciudad alemana de Nuremberg, un juicio para juzgar y castigar a los jerarcas nazis responsables del genocidio de tantos seres humanos pero no todos los jerarcas nazis fueron enjuiciados.
La lista de los nazis que huyeron y se aseguraron un buen exilio es enorme. El plan para su huida ya estaba pactado mucho tiempo antes de que finalizara la guerra mediante la “ Operación Odessa”.
El precio que debían pagar por la huída, era la colaboración y el pago de cuantiosas sumas de dinero a aquellos que irían a utilizar sus “servicios y conocimientos”.
Como aves de rapiña muchos países de América, se repartieron a los mas célebres cerebros del nazismo alentados en la mayoría de los casos por sus antiguas simpatías y colaboraciones con los nazis.

La colaboración.
La colaboración entre los nazis y los Estados Unidos para distintos “negocios”, operaciones de inteligencia y experimentos aberrantes datan de muchos años antes de que se desatara la segunda guerra mundial y sus conexiones están directamente relacionadas con el momento en que el partido nacionalsocialista alemán se enquistara en el poder.
Como bien lo ilustran Simon Dunstan y Gerrard Williams en su libro “Lobo Gris”, "Entre la plaga de nuevas leyes promulgadas en 1933, por el tercer Reich, estaba la ley para la esterilización obligatoria de las personas que sufrían “defectos mentales congénitos, esquizofrenia, psicosis maníaco-depresiva, epilepsia hereditaria y severos casos de alcoholismo”. Los alemanes no eran los únicos entusiastas de la pseudo ciencia de la eugenesia, que en las décadas de 1920 y 1934, contaba con amplio apoyo en toda Europa y en los Estados Unidos en beneficio de la “higiene racial”. Uno de sus defensores era John D. Rockefeller, el fundador de Standard Oil de Nueva Jersey, y fue su Fundación Rockefeller la que proveyó gran parte de los fondos al Kaiser Wilhelm Institute, la más prestigiosa escuela de Medicina de Alemania, para llevar a cabo estudios en “Antropología,eugenesia y herencia humana,bajo la dirección del psiquiatra suizo y ferviente nazi Ernst Rudin”.
La lista de colaboraciones entre ambos países fue numerosa, este es uno de los tantos ejemplos que puede ilustrar que a los Estados Unidos los unía algo mucho mas oscuro que intereses economicos con los nazis; los unía una vinculación mucho mas poderosa que traspasaba las fronteras y cuyo poder era mucho más fuerte que las decisiones futuras del gobierno estadounidense de colocarse en las tropas aliadas que derrocarían a los alemanes.
Esa posición fue una verdadera pantalla para encubrir los reales intereses del “verdadero poder” que comandaba al país del norte de América.
Cuando finalizó la segunda guerra mundial sin perder tiempo comenzaron a organizarse una nomina de operaciones para contar con la colaboración de aquellos que en teoría habían sido derrotados.
Una de las operaciones de inteligencia que se llevó a cabo para lograr la colaboración de los nazis con el gobierno estadounidense fue la operación Paperclip llamada anteriormente Operación Overcast. Se escogieron a los mejores científicos, médicos, militares e ideólogos nazis para que trabajaran con el gobierno estadounidense.
La nómina de operaciones para el reclutamiento de nazis llevados a cabo por la OSS, el CIC o Counter Intelligence Corps, servicio secreto norteamericano que funcionaba en Alemania y luego por la CIA, que habia sido fundada en 1947, fue numerosa.
La reclusión de nazis que serían utilizados para el asesoramiento y la organización de nuevos servicios de inteligencia fue realizada por el más secreto de los servicios secretos, la Stay-Behind.
Estos servicios fueron creados unos meses antes de la finalización de la segunda guerra mundial, y fueron los encargados de localizar a los agentes nazis dispersos después de la retirada del ejercito alemán.
Uno de los primeros reclutados mediante las redes del Stay-Behin fue el general Reinhald Gehlen, ex jefe del servicio de contrainteligencia en el Frente Oriental; Gehlen, fue considerado uno de los mayores espias durante la guerra fría y con el apoyo de los servicios de inteligencia de los Estados Unidos y de otros paises europeos organizó la “Organización Gehler”.
Aportó sus archivos y su red de contactos, y trabajó en una estrecha relación durante varios años con la CIA reclutando a su vez a antiguos colaboradores.
La lista de empleados nazis a la causa estadounidense fue en aumento. Se le daba asilo y protección a jerarcas nazis que pertenecían a los servicios de inteligencia alemanes, entre ellos la Gestapo (policía alemana) y los Abwher ,el servicio secreto alemán, que había estado desde 1935 hasta 1944 bajos las órdenes del legendario almirante Wilhelm Canaris, el mismo que había reactivado en el año 1927 la organización Ettapendiest y quien conocía perfectamente la Patagonia argentina.
Los norteamericanos, sabían además que los alemanes habían articulado a la perfección la gestión militar con la politica y articulado una estructura militar y otra paramilitar.
Esta estructura les serviría para detectar las gestiones Rusas e impedir y combatir el avance del comunismo avance que se concretaría unas décadas más tarde en Latinoamérica.
Tanto los ex jerarcas nazis como los estadounidenses tenÍan algo en común: “El avance del comunismo era comparable a la proliferación de una peste que podía expandirse y carcomer a una población”. Por lo tanto los estadounidenses se preparaban ante una probable guerra con la Unión Soviética y se apresuraba a contar en sus líneas de inteligencia a expertos espías y torturadores.
Entre los nazis que tuvieron directa relación con los servicios de inteligencia se encontraban Klaus Barbie , quien tendría un protagonismo fundamental unos años más tarde, Martin Borman; a quien los mismos nazis se reportaban a pesar de estar fuera de Alemania; Ante Pavelic,el genocida Croata que había huído por la ruta de las ratas hacia Austria, Erik Pribke y muchos otros que se habían “salvado” no casualmente de los juicios de Nuremberg.

El caso de Klaus Barbie merece una atención particular ya que fue uno de los nazis que tuvo mayor influencia en la creación de los servicios de inteligencia bolivianos y de varios países del Cono Sur.
Barbie fue reclutado por los estadounidenses en la primavera del año 1947. Su función era la de organizar redes de espionaje para los americanos.
Trabajaba bajo un sueldo fijo y con nombres distintos que iba cambiando según la ocasión. En el año 1950, la CIC decidió darle una nueva identidad y enviarlo junto a su esposa y sus dos hijos a un país lejano de America del Sur, se eligió a Bolivia.
Zarparon del puerto de Génova en marzo del año 1951 y tres semanas más tarde llegaban al puerto de Buenos Aires. Se hospedaron en el hotel El Dorado y luego se dirigieron por tren hacia la ciudad de La Paz, en Bolivia.
La participación de Barbie en la organización de los servicios secretos bolivianos fue crucial, a tal punto que para pasar inadvertido se empleo primero como mecánico hasta llegar a ser el primer gerente de Transmarítima Boliviana, la nueva línea de barcos mercantes, pero seguía bajo las ordenes y el control de la CIA. El ex jefe de la gestapo alemana, en Lyon permaneció “protegido” treinta y dos años. En todo ese período participo en la organización de los servicios de contrainsurgencia, nombrado en el año 1964 por el mismo general René Barrientos, quien lo nombró asesor del ejercito Boliviano en la especialidad de contrainsurgencia.
Tras el triunfo de la revolución Cubana pusieron en alerta a Barbie para extremar las medidas de seguridad y fortalecer a los grupos paramilitares que él mismo había armado en Bolivia y que eran llamados “Los novios de la muerte”, estos grupos paramilitares operaron en distintos países latinoamericanos y también se los conocío con el nombre de “Escuadrones de la muerte”.
La guerrilla del Che, fue combatida en suelo boliviano por el mismo ex jefe de la Gestapo asesorando en técnicas de represión, tortura y ejecución. Fué uno de los ideólogos que preparó a los servicios bolivianos para atrapar al Che, hecho que se produjo en 1969.
También asesoró a varios militares argentinos y chilenos en técnicas de contrainsurgencia que serían aplicadas en el Cono Sur a través del Operativo Cóndor.
Barbie no actuaba sólo, tuvo colaboración de otros militares que venían planeando un plan de exterminio que sería ejecutado en el Cono Sur. Entre ellos se encontraban militares argentinos.
Este fragmento extraído de una publicación de Gustavo Salazar Sánchez, quien fuera periodista y viceministro del interior de Bolivia da cuenta de ello:
“Don Klaus”controlaba también a otros grupos de neonazis que aparecieron en Bolivia en esa época.
Los terroristas cumplían las órdenes de su jefe, sin retroceder ante el asesinato a sangre fría. El trabajo político, a campaña de prensa, la infiltración en partidos políticos, en organizaciones obreras o religiosas, las actividades del cuerpo diplomático, todo cuanto tenía que ver con la vida misma de la nación era controlado por maleantes a las ordenes del ex jefe de la Gestapo de Lyon.
Los militares argentinos que participaron en la preparación de cuadros paramilitares en Bolivia no dudaron en ningún momento del éxito de su mision. Los coroneles Carlos Estrada y Julio César Durand, el teniente coronel Jorge P. Lynch,e l asesor especializado Mario Mingolla y otros se dedicaron pacientemente en el golpe de 1980 que llevó a García Meza al poder.
Los argentinos pretendían utilizar a Bolivia como traspatio para sus turbios manejos. Sería, pensaban un buen campo de experimentación para instaurar la política del neofascismo en el continente latinoamericano. Es en ese contexto que brillan los consejeros nazis, x soldados de la Gestapo, criminales que cometieron todo tipo de atrocidades en los países ocupados de Europa.
Alfredo Mignolla, quien trabajó estrechamente ligado a Barbie, aseguró que prestó servicios en Bolivia por cuenta del ejército argentino. También declaró que respondía a las instrucciones de la CIA. Anteriormente se había desempeñado en Guatemala, Honduras y Panamá. Fue entrenado en la Escuela de las Américas para la guerra sucia contra el comunismo. En varias oportunidades, entregó prisioneros al Brasil y a la Argentina.
El excarnicero de Lyon dirigió y ayudó apoyado por los Estados Unidos a la concreción de golpes militares que se fueron sucediendo. Uno de ellos fue el golpe perpetrado por el general Luis García Meza en julio de 1980. Barbie fue expulsado de Bolivia en febrero de 1983, tras largos años de “protección.
Como se ve, la colaboración de antiguos jerarcas nazis fue un hecho innegable de la historia latinoamericana.

La concreción de los planes.
El objetivo principal de los norteamericanos era impedir el avance comunista y proteger sus intereses económicos sobre todo en los países latinoamericanos que les servían para su beneficio propio.
Latinoamérica estaba inmersa en el marco de la guerra fría y el enemigo estaba dentro, por lo tanto era necesario comenzar a ejecutar un plan para impedir el avance del comunismo en esas latitudes. Ayudados entonces por antiguos jerarcas nazis, que también recibían instrucciones; organizaciones de ultraderecha e ideologias anticomunistas. A sólo un año de finalizada la segunda guerra mundial se creó el Instituto del Hemisferio Occidental para la cooperación en seguridad más conocido como la “Escuela de las Américas”; escuela que estuvo hasta el año 1984 en Panamá y luego fue transladada a Fort Benning, en Columbus, Georgia, Estados Unidos.
En esta escuela se entrenaban a militares, a colaboradores y a policías; el objetivo principal era impedir el avance de las ideologías de izquierda, fortalecer la paz y la seguridad, consolidar las democracias representativas, resolver de manera pacífica disputas y solidarizarse con la conducción de acciones militares ante cualquier agresión, pero la realidad distaba de estas consignas.
Las intenciones eran otras: ”Reprimir, combatir y ejecutar a todo enemigo que atentara contra los intereses políticos y económicos de los Estados Unidos y sus países satélites en cualquier parte del mundo y sobre todo en Latinoamérica.
En la escuela se los entrenaba militarmente se los adoctrinaba, se les enseñaban técnicas de contrainsurgencia, operaciones de comando, guerra psicológica, inteligencia militar y tácticas de interrogatorio.
Tras el triunfo de la revolución Cubana, en 1959, se impartieron con mayor severidad las clases ya que la amenaza comunista había pisado el suelo latinoamericano, por lo tanto el enemigo estaba cerca.
Estados Unidos, extremó las medidas de seguridad convirtiendo a la escuela en un centro de entrenamiento para las fuerzas latinoamericanas basando sus objetivos de represión y despolitización en la Doctrina de seguridad nacional.
Los cursos del Instituto del Hemisferio Occidental para la cooperación en seguridad, acrecentaron por lo tanto sus planes de estudio. Se dictaban clases en español para los alumnos latinoamericanos y se les repartían distintos manuales para su estudio.
Estos manuales eran : "Manejo de fuentes de información; Contrainteligencia; Guerra revolucionaria, guerrillas e ideología comunista; Terrorismo y guerrilla urbana, Interrogacion, Combate de inteligencia, Análisis de la inteligencia y un manual de tortura, el famoso Kubark, que consistía en técnicas para la interrogación que incluían la motivación por miedo, el uso del suero de la verdad (usado y experimentado por los nazis en los campos de concentración), la tortura por electrocución, la extorsión, y el secuestro y arresto de miembros de la familia del blanco.”
Todos estos manuales fueron usados en numerosos países y distribuídos por equipos de las fuerzas especiales de entrenamiento al personal militar y a las escuelas de inteligencia en El Salvador, Colombia, Chile, Argentina, Ecuador, Guatemala, Perú y Nicaragua.
La mayor parte de los militares latinoamericanos que perpetraron sucesivos golpes de estado fueron formados en esta escuela.
La lista es numerosa pero algunos de ellos son: General Manuel Noriega; responsable del gobierno militar en Panamá, colaborador de la CIA; el general Hugo Banzer, responsable del golpe militar de Bolivia en el año 1971, Elias Wessin, responsable del golpe militar dominicano llevado a cabo en 1963; el general Héctor Gramajo,e x ministro de Guatemala ; el general Roberto Eduardo Viola, responsable del golpe de estado de 1976, en argentina; Leopoldo Fortunato Galtieri, líder de los últimos años de la Junta militar argentina y responsable de la guerra de las Malvinas; Santiago Martin Rivas, agente de inteligencia que realizó asesinatos durante el gobierno de Alberto Fujimori por encargo de los Estados Unidos; Manuel Contreras, jefe de inteligencia de la DINA, servicio secreto de Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet; Ollanta Humala,ex militar peruano.

El Operativo Cóndor y los antecedentes del terror:
La revolución Cubana puso sobre aviso a los Estados Unidos de que una postura revolucionaria se diseminaría a varios países latinoamericanos. Los servicios de inteligencia ya habían detectado numerosas actividades de organizaciones armadas.
En el cono sur, proliferaban distintos movimientos de izquierda, muchos nacidos en el seno de gobiernos populares y otros en repudio a los golpes militares
Toda oposición, toda manifestacion y toda expresión de duda era sospechosa. Los servicios de inteligencia recibían permanentes alertas de infiltraciones de Cubanos y de Rusos al suelo sudamericano.
Se sabía que la mayoría de los guerrilleros se  entrenaban y recibían instrucción militar por expertos guerrilleros que habían actuado en distintas latitudes del planeta.
Fue necesario entonces organizarse y actuar. Los norteamericanos solventaron, apoyaron y alentaron distintos golpes de estado que no casualmente serían perpetrados por exalumnos de la “Escuela de las Americas “quienes habían recibido una estricta instrucción de como actuar contra lo que consideraban blancos subversivos.
Para aniquilar a toda organización de la izquierda revolucionaria contaban con expertos en exterminio, y espías infiltrados en las lineas de la guerrilla. Pero lo más sorprendente fue que el plan u Operativo Cóndor tuvo también una marcada influencia de los nazis. Los lineamientos generales para su elaboración y posterior ejecución se basaron en un decreto firmado por Adolf Hitler el 7 de diciembre del año 1941. Este decreto fue conocido como “Nacht Und Nebel” en español, “Noche y niebla”,o decreto NN. Hitler daba las directivas para la represión y la eliminación física de oponentes al régimen nazi. Todos los prisioneros eran tomados y deportados secretamente sin ningún rastro ni testimonio que dejara huellas. Eran detenidos y perseguidos durante la noche y se los identificaba con las letras NN. El mismo Hitler se encargaba de afirmar entre sus pares que la toma de estas medidas era necesaria ya que permitía la desaparición de los acusados sin dejar rastros. Ninguna información podía ser difundida con respecto a su paradero o su destino. Muchas de las víctimas procedían no sólo de Alemania sino también de Francia, Bélgica y Holanda.
En el cono Sur este decreto fue aplicado muchas décadas más tardes. El plan de exterminio y sus gestores respondían a los mismos lineamientos: ocultos y oscuros intereses se apoderaban una vez más y ejercían el poder y el control. En América del Sur, el control y la dominación se llamo “Sistema de inteligencia Cóndor” conocido como el “Plan Cóndor”, una red perfectamente organizada y trazada en donde intervenían Chile, Argentina, Paraguay, Uruguay, Brasil y Bolivia, países que eran perfectamente conocidos por los nazis, que les habían servido de refugio, de asilo y de protección desde la década del '30 y que no habían sido escogidos por casualidad sino que respondían a un plan mucho mas complejo que traspasaba las fronteras de los países ejecutores. Este operativo, fue planeado y puesto en marcha a partir de la década del '70. Para el año 1974 oficiales de seguridad de todos estos países se reunían en Buenos Aires para preparar acciones coordinadas en contra de los llamados blancos subversivos. Para diciembre de 1975, ya se había puesto en marcha y finalizado el "Operativo Independencia" en la selva Tucumana (el general Antonio Bussi quien regenteaba el operativo independencia era también un exalumno de la Escuela de las Américas).
Este operativo sirvió como antecedente directo del Operativo Cóndor y también había contado con el apoyo de los Estados Unidos para su ejecución. Los aviones que habían sido utilizados llevaban pintados sobre las banderas estadounidenses las escarapelas del ejército argentino.
Los servicios de inteligencia intercambiaban información sobre exiliados, agrupaciones y movimientos revolucionarios mientras armaban los campos de exterminio tal como lo habían hecho los nazis.Comenzó entonces a aplicarse el terrorismo de estado, todo sospechoso de actividades subversivas era secuestrado, llevado a los campos de concentración preparados para ello, se les aplicaban distintos métodos de tortura para sacarles informaciones, delataran a sus jefes y a otros compañeros y luego se los asesinaba “sin dejar rastros” se convertían así en desaparecidos o en “NN”. Eduardo Galeano decía en su libro “Las venas abiertas de América Latina”: "Para operar con eficacia la represión debe parecer arbitraria. Excepto la respiración, toda actividad humana puede constituir un delito. En Uruguay la tortura se aplica como sistema habitual de interrogatorio: cualquiera puede ser víctima, y no sólo los sospechosos y los culpables de actos de oposición. De esta manera se difunde el pánico de la tortura entre todos los ciudadanos, como un gas paralizante que invade cada casa y se mete en el alma de cada ciudadano. En Chile, la cacería dejó un saldo de miles de muertos, pero en Argentina no se fusila:s e secuestra. Las víctimas desaparecen. Los invisibles ejércitos de la noche realizan la tarea. No hay cadáveres, no hay responsables. Asi la matanza, siempre oficiosa, nunca oficial se realiza con mayor impunidad, y así se irradia con mayor potencia la angustia colectiva. Nadie rinde cuentas, nadie brinda explicaciones. Cada crimen es una dolorosa incertidumbre para los seres cercanos a la víctima y también una advertencia para todos los demás. El terrorismo de Estado se propone paralizar a la población por el miedo". Paradójicamente a las palabras volcadas en su libro por Galeano el mismo Adolf Hitler treinta y cuatro años antes, explicaba el objetivo de su decreto: “Una intimidación efectiva y duradera sólo se logra por penas de muerte o por medidas que mantengan a los familiares y a la población en la incertidumbre sobre la suerte del reo y por la misma razón, la entrega del cuerpo para su entierro en su lugar de origen, no es aconsejable, porque el lugar del entierro podrá ser utilizado para manifestaciones”.
Queda más que demostrado entonces que el mal no había muerto, por el contrario la “Operación Exterminio”  había sido llevada a cabo nuevamente con éxito, habían cambiado los personajes, los lugares, las situaciones pero la “orden” había sido nuevamente ejecutada: "A través de la diseminación de tal terror toda disposición de resistencia entre el pueblo, será eliminada”...

Por Andrea Ravalli
Astrolabio del Tiempo
www.astrolabiodeltiempo.com.ar/


Un agradecimiento muy especial a "Astrolabio del Tiempo" dado el intercambio de artículos y la mutua colaboración con "Historias Lado B".

Nota original:
http://www.astrolabiodeltiempo.com.ar/articulo.php?art=122

Bibliografía consultada:

Daniel Jonah Godhagen.”Los verdugos voluntarios de Hitler”,editorial Taurus,1997
Michael Burleigh.”El tercer Reich”,editorial Taurus
Simon Dunstan y Gerrard Williams.”Lobo gris”,la fuga de Hitler a la argentina-1 ed-Buenos Aires:Distal 2012
De Nápolis Carlos.”Nazis en el sur-1 ed-Buenos Aires:grupo editorial Norma,2005
Galeano Eduardo.”Las venas abiertas de América Latina-editorial Siglo veintiuno
Gustavo Sánchez Salazar y Elisabhet Reimann”Barbie,criminal hasta el fin”-editorial Legasa
Uki Goñi.”La auténtica Odessa:La fuga Nazi a la argentina de Perón”-editorial Paidós Ibérica-2002

Artículos:
Paredes Alejandro.”La operación Cóndor y la guerra fría”.Revista Universum nº19.


viernes, 26 de julio de 2013

“Historia de la solución final” por Daniel Rafecas: Mesa redonda y presentación del libro en el Colegio Pestalozzi

En Abril de 2013, el Juez Daniel Rafecas hizo una (de las tantas) presentaciones de su libro "Historia de la Solución Final", esta vez en el Colegio Pestalozzi. Como es de rigor, después, en el boletín del Colegio, se publicó una nota sobre el evento y, junto con ella, un comentario de Michael Röhrig, el flamante nuevo director general de la Institución enviado por Alemania. "Historias Lado B" publica este muy interesante relato de la posición entre alemanes nazis y alemanes no nazis en la actualidad.

Daniel Rafecas: debate sobre "Historia de la Solución Final" en el Colegio Pestalozzi.


“Historia de la solución final”:
Mesa redonda y presentación del libro en el Colegio Pestalozzi.
Como anunciáramos en nuestro Boletín anterior (marzo-abril 2013, pág. 8), en el marco de las acciones culturales realizadas por la Asociación Cultural Pestalozzi, el miércoles 10 de abril fue invitado el Dr. Daniel Rafecas para presentar la cuarta edición de su libro “Historia de la solución final”. Acompañaron al Dr. Rafecas la Sra. Graciela Fernández Meijide, la Sra. Diana Wang, el Sr. Ricardo Hirsch y el Sr. Luis Mesyngier, quienes participaron de la exposición aportando un valioso y diferente abordaje del tema del Holocausto y otros genocidios. La motivación que llevó al autor a desarrollar la “indagación de las etapas que provocaron el exterminio de los judíos europeos” ha sido que “desde la docencia faltaba una herramienta para acercarnos a la comprensión de la Shoá, porque los autores que usamos reflexionan sobre Auschwitz dando por sentado que el lector conoce cómo se llegó a Auschwitz”.  El Dr. Rafecas hizo referencia el método de la indagación judicial, experiencia recogida con el equipo con que investigó la causa referida a los crímenes de lesa humanidad cometidos en la dictadura en el Primer Cuerpo de Ejército. Por otra parte, Diana Wang, señaló que la Shoá durante varias décadas fue vista como un rayo fatídico que había caído sobre la Humanidad, una desgracia insólita, inédita, inasible e imposible de comprender. Nuestro problema es que, igual a lo sucedido con el rayo, mientras siga siendo fatídico, mientras no se conozca su mecanismo de generación, seguiremos estando a su merced. Rezar y hacer ofrendas calmará a quien lo hace, le dará el consuelo o la ilusión de estar  haciendo algo, pero no lo detendrá. Si la Shoá no tiene explicación, si no se la estudia, analiza y comprende, no habrá forma de predecir ni de implementar las políticas necesarias para hacer más difícil su repetición o para atenuar sus efectos. Concluyendo, Graciela Fernández Meijide se preguntaba si, alertados con libros como el de Daniel Rafecas, interesante, persuasivo, de contenido aterrador aliviado por la firme convicción de que la humanidad sólo puede avanzar si afronta su falta de humanidad y se dispone a batallar contra ella, somos capaces de lograr que el pasado se convierta en la base de una construcción cada vez más libre y democrática.  Estos breves pero sustanciales comentarios, parciales por cierto, pues la participación fue más extensa tanto en comentarios como en los oradores, caracterizaron una actualizada y profunda reflexión que conmovió a una nutrida audiencia.  Nuestro especial agradecimiento al Dr. Daniel Rafecas por su presencia en el Colegio Pestalozzi. Las exposiciones completas de Diana Wang y de Graciela Fernández Meijide pueden leerse en nuestro sitio institucional en la sección de Novedades (http://www.pestalozzi.edu.ar/es/novedades/presentacion-del-libro-historia-de-la-solucion-final-del-dr-daniel-rafecas.html).


Izq: Michael Röhrig, Director del Colegio Pestalozzi y autor de una excelente columna de opinión en el Argentinisches Tagebaltt.  Der: El Dr. Rafecas con la Sra. Graciela Fernández Meijide y la Sra. Diana Wang en el Colegio Pestalozzi.


Columna de opinión:
Nieto de nazi: reflexión de un alemán en la Argentina durante la presentación del libro de Daniel Rafecas.  

En Alemania es ineludible ocuparse de los crímenes del Tercer Reich, y eso está muy bien. Al hacerlo, cada alemán descubre su propia relación familiar con el Holocausto. En mi caso, esto se puede describir lisa y llanamente: soy el nieto de un nacionalsocialista. En realidad, esto tendría que haber sido una afirmación neutral. Pero debido a mi nacionalidad eso es imposible. Esta supuesta descripción siempre irá acompañada de muchas connotaciones: justificación, confesión, provocación…Pertenezco a la tercera generación de la posguerra y realmente nunca hablé demasiado sobre el Holocausto con mis padres, al igual como les sucedió a tantas otras personas de mi edad. A lo largo de mi juventud y a medida que avanzaba en la vida, en la convivencia con mi querido abuelo cada vez se me ponía de manifiesto con mayor claridad que era el nieto de un hombre marcado por su ideología nacionalsocialista. Doy por sentado que no tuvo ningún cargo influyente y que no tenía poder de decisión, pero seguro que tampoco fue simplemente un simpatizante. Nunca olvidaré los ojos cargados de odio de mi simpático abuelo cuando en la década del 90 vi junto con él un programa televisivo sobre los padecimientos de los judíos en el Tercer Reich. (Por qué me extiendo tanto en esto. Sólo teniendo en cuenta este contexto biográfico puede quedar mínimamente clara la fuerte impresión que causó la presentación de libro y la posterior mesa redonda sobre un recién llegado a Buenos Aires). Pues bien, durante la presentación del libro “Historia de la solución final“ de Daniel Rafecas el 10/04/2013 me encontré sentado en el Auditorio del Colegio Pestalozzi sintiéndome un poco solo como único sucesor de la generación de los victimarios, aunque ésto, como quedó de manifiesto luego, no era realmente así. ¿Qué le espera a un alemán recientemente llegado en un evento así? Sobre mi historia aprendí mucho en el colegio y de los libros. Ya tuve oportunidad de elaborar mis sentimientos de culpa y la responsabilidad de mi generación en diversas actividades políticas, de voluntariado y escolares. En ese sentido, en los últimos años participé asiduamente en diversas actividades antinazis en Alemania, como por ejemplo en un programa radial en Marburg, en manifestaciones, etc. Nunca leí en Alemania un análisis tan sistemático del desarrollo del exterminio de los judíos europeos. Daniel Rafecas convence por su modo claro y casi sobrio de analizar estos acontecimientos terribles. La editorial describe acertadamente su trabajo como una cronología, cosa que desde mi punto de vista, junto con la notable investigación científica, constituye la gran fortaleza del libro. Casi no vale la pena mencionar que por supuesto a lo largo de la velada me enteré de gran cantidad de datos nuevos que me ayudaron a comprender un poco lo inconcebible. Pero recién hacia el final del evento comprendí cuál era el particular aporte de Daniel Rafecas para mí. Era el primer especialista neutral, es decir, ni sucesor de la generación de las víctimas ni de los victimarios, que me podía contar algo sobre mi propia historia y, por lo tanto, sobre mi propia identidad, desde una perspectiva imparcial. Esa condición de no llevar una carga previa permite un debate especialmente intenso que justamente no se deja distraer por ninguna connotación ni por la culpa ni por sentimientos de justificación. Gracias, Daniel Rafecas (y a los demás integrantes de la mesa redonda, como Diana Wang y Graciela Fernández Meijide, cuyas exposiciones realmente hubieran merecido una columna de opinión aparte) por sus profundas miradas sobre la historia de Alemania y, sobre todo, por el aporte a un debate tan importante para que los alemanes podamos analizar las miradas llenas de odio de muchos abuelos de mi generación.

Michael Röhrig 

Un agradecimiento especial al Lic. Roberto Hubscher, encargado del Archivo Histórico del Colegio Pestalozzi, por su invalorable aporte constante a "Historias Lado B".

Publicado originalmente en idioma alemán en el Argentinisches Tageblatt del 20/04/2013. 
http://tageblatt.com.ar/pdf_free/20-04-13_2.pdf

lunes, 15 de julio de 2013

Colegio Pestalozzi: símbolo de la resistencia contra el nazismo en la Argentina. Parte 6. Los enfrentamientos con el nazismo argentino y mundial en los años '30

Los enfrentamientos con el nazismo argentino y mundial en los años '30.


Presentamos la 6ª parte del informe exclusivo sobre el Colegio Pestalozzi y su lucha contra el nazismo en la Argentina. El Licenciado Roberto Hubscher (Encargado del Archivo Histórico del Colegio Pestalozzi) nuevamente aporta sus relatos, sostenidos por una contundente dosis de información y documentos que dan cuenta de la tremenda lucha de la Institución alemana contra los nazis en la Argentina. 
Una vez más, vaya nuestro sincero agradecimiento al Licenciado Roberto Hubscher por su invalorable aporte a Historias Lado B.


Historias Lado B: Lo particular de la comunidad en torno al Pestalozzi de aquellos años de la década del '30 es que tanto los profesores y maestros compartían con los alumnos y sus familias algo que les daba una unidad difícil de encontrar: todos (o muchos de ellos) habían escapado bajo las mismas circunstancias de Alemania, espantados por el nazismo, lo que debe haber fortalecido el espíritu de toda esa comunidad que debía enfrentarse con una sociedad que no iba en el mismo sentido precisamente... ¿Se sabe de algunos problemas o inconvenientes que haya experimentado la comunidad del Colegio Pestalozzi dada su postura anti-nazi en una sociedad argentina que simpatizaba claramente con el régimen?

Roberto Hübscher: Cuando  me hicieron la misma pregunta en la 5ª entrevista virtual, en Diciembre del año pasado, aún no había encontrado pruebas concretas de enfrentamientos entre los nazis y los germanoparlantes librepensadores de la Argentina, aunque tenía el convencimiento de que existieron.  Documentación que fue apareciendo lo confirma y los describe en parte.

Del discurso de inauguración del fundador, Dr. Ernesto F. Alemann, reencontramos los siguientes párrafos, que dan una idea sobre las condiciones vigentes:

“En estos años no ha faltado una enemistad, tanto abierta como  encubierta, ataques y emboscadas. Comenzando por la tentativa de una fuerza de choque nazi de hacer estallar la sala en nuestra segunda noche de disertación, en 1934 – en ese experimento algunos típicos representantes de “camisas marrones” fueron entregados en la comisaría con sus cabezas ensangrentadas – hasta los asaltos a alumnos y bombas de alquitrán en el frente de nuestra casa, fue poco lo que no se intentó para molestar nuestro pacífico trabajo de construcción. No nos hemos dejado influenciar por eso; no obstante tampoco hemos ofrecido la cara para recibir cachetadas. Los enviados del “Tercer Reich”, en nuestro caso, han mordido granito. Así resulta una gran enseñanza de la construcción y éxito de la “Sociedad Pestalozzi”:  Si bien a veces parece que todas las olas se precipitan sobre nuestras cabezas y que ya no se vislumbra una escapatoria de la inclemencia de los tiempos, nunca se debe perder la valentía, nunca abandonar la lucha. O, como lo ha expresado Goethe – por el que ya se justifica aprender y conservar el idioma alemán:

Feiger Gedanken: Pensamiento cobarde
Bängliches Schwanken: Vacilar, temeroso
Weibliches Zagen: Timidez femenina
Ängstliches Klagen: Queja temerosa
Wended kein Elend: No revierten la desdicha
Macht dich nicht frei: Jamás te liberarán

Allen Gewalten: Permanecer desafiante
Zum Trutz sich erhalten: Contra toda potencia
Nimmer sich beuguen: No doblegarse nunca
Kräftig sich zeigen: Demostrar tu fuerza
Rufet die Arme: De potentes brazos de dioses
Der Götter herbei: el apoyo conjurará


Creo  conveniente  ubicar éstos acontecimientos en el periodo de la historia argentina, que se recuerda como la “década infame”, el período que comienza el 6 de septiembre de 1930 con el golpe de Estado cívico-militar que derrocó al Presidente Hipólito Yrigoyen y finaliza el 4 de junio de 1943 con el golpe de Estado militar que derrocó al presidente Ramón Castillo, y el periodo inmediatamente posterior. Con el contexto mundial de la Gran Depresión, al comienzo, y luego la Guerra Civil Española (1936-1939) y la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), la etapa se caracterizó por el fraude electoral sistemático, la represión a los opositores, la proscripción de la Unión Cívica Radical y la corrupción generalizada. (como se ve, no hay nada nuevo bajo el Sol…) El 6 de septiembre de 1930, Uriburu encabezó un golpe de Estado que derrocó al gobierno constitucional de Hipólito Yrigoyen y estableció una dictadura militar, de inspiración fascista. Uriburu fue reconocido como presidente de facto de la Nación por la Corte Suprema mediante la acordada que dio origen a la doctrina de los gobiernos de facto. Disolvió el Congreso, declaró el estado de sitio, intervino todas las provincias y, en rasgos generales, quiso implantar un gobierno elitista autoritario de naturaleza fascista, régimen del que era admirador. Estableció un régimen represivo que incluyó por primera vez la utilización sistemática de la tortura contra los opositores políticos mediante la creación de la Sección Especial de la Policía Federal con ese fin. Detuvo a varios dirigentes políticos, entre ellos a Hipólito Yrigoyen, impuso censura a los diarios, intervino las universidades anulando el régimen de autonomía y cogobierno establecido desde la Reforma Universitaria de 1918. Se nota un notable paralelismo con la evolución en Alemania de una fracción nacionalista “indignada por la vergüenza del Tratado de Versalles”, que ofendía el orgullo alemán. Simultáneamente, en Guadalajara, México, surgía también el grupo de los Tecos, inicialmente  una sociedad secreta  originaria de las controversias de la Iglesia Católica y la Masonería y errónea la teoría del “comunismo = judaísmo” más el libelo inventado para el Zar Nicolás, la falsa historia de la confabulación universal de los judíos para conquistar el mundo: “Los protocolos de los sabios de Sión”. Ideas que también tuvieron notable repercusión en la ultraderecha de los EE.UU. de Norteamérica, todos los cuales después adoptaron el antisemitismo como bandera y los judíos con los primeros (pero no los únicos) enemigos a eliminar. (recuerda el uso de la palabra “aniquilamiento”  de Isabel Perón: eliminar… como, no importa).
O sea que en la época del nacimiento del Colegio Pestalozzi, el nazismo estaba bien afianzado en la Argentina, por los fascistas argentinos, por una parte, y una gran parte de la colonia alemana ya radicada en el país, que mantenían su orgullosa posición patriota sin (aún) analizar su real contenido.
La creación y el desenvolvimiento del Colegio Pestalozzi y del diario Argentinisches Tageblatt, que fue su originario y simbiótico en ideales y personajes, se desarrollaron en ese ambiente de controversia política feroz. Una brillante y amena descripción de las circunstancias de la época las da el genial Marcos Aguinis en su novela histórica “La matriz del infierno”: un descendiente de una familia patricia conservadora argentina se casa con una niña judía, a la que a su vez conoce un joven argentino de ascendencia alemana, cooptado para una fuerza de choque nazi en Buenos Aires.  El joven marido es designado embajador en Berlín y el matrimonio viaja a Alemania. Descubren que la mujer es judía y sigue el desarrollo de la trama. Entre los personajes inventados circulan los políticos reales de aquella época y las situaciones que se suscitaron.
Siendo presidente argentino el general J.B. Justo, de decidida posición fascista, asumió el poder en Alemania Adolfo Hitler en 1933. 
Como consecuencia inmediata, fue removido el embajador alemán Heinrich von Kaufmann – Asser, de accionar demasiado “tibio” para la Patria Alemana y, para colmo, de ascendencia judía, para ser sustituido inmediatamente por el barón Von Thermann, diplomático alemán de carrera, que entró el 1 de Abril de 1933  al NSDAP (Partido Nazi) y fue incorporado personalmente por  Heinrich Himmler, jefe supremo de la policía de seguridad nazi, en la SS (SchutzStaffel: guardia personal de Adolfo Hitler) con el grado de “Sturmführer” ( comparable con el grado de teniente en el ejército). 

Embajador alemán Von Thermann y los nazis en la Argentina.


No solo estaba relacionado con las altas autoridades del Reich, sino, por otra parte, era amigo personal del general argentino Juan Bautista Molina, ultranacionalista, que fue agregado militar en Alemania y fundador de la  Legión Cívica Argentina, fascista y antisemita, que tuvo sus ramas femenina y juveniles similares a las organizaciones nazis alemanas, que luego se transformó en la Alianza Libertadora Nacionalista hasta que fue desmembrada por la revolución de 1955 que destituyó al presidente Perón.
Von Thermann presentó sus cartas credenciales comportándose como un emperador y, a pesar de que ello se desmiente frecuentemente, a mí no me queda duda que su intención era trabajar para establecer en la Argentina un apéndice del Estado y de la ideología nazi del Tercer Reich.

Una parte importante de la batalla de desarrollo en el ambiente de la prensa escrita. El siguiente extracto hace una descripción bastante amplia y precisa de la situación.

La guerra de la prensa alemana en la Argentina.


Un ejemplo  de  esta guerra  lo dio  una entrevista que dio, a horas de su arribo, el Dr. Alfredo Dang, contratado por el Dr. Ernesto Alemann para dirigir el flamante Colegio Pestalozzi:

El Dr. Alfredo Lang y su denuncia a Hitler.


En un artículo publicado por Jorge Ismar, décadas más tarde, explica:
“En realidad son dos poblaciones, la republicana y la nacionalsocialista (…) pero las dos poblaciones están insuperablemente separadas (…) Porque nosotros tenemos un teatro; los otros también tienen uno; tenemos cada uno un diario, una escuela, asociaciones, conferencias, en ambos entornos alemanes. Pero la separación es tan absoluta, que en una población es posible olvidarse que la otra existe.”  Con estas palabras describió un exiliado, Balder Orden, la situación de la comunidad alemana en el Rio de la Plata en la época del nazismo. Un reflejo de esta situación se convirtió el conflicto de los dos mayores diarios alemanes, el Argentinisches Tageblatt y la Deutsche La Plata Zeitung.

Tapa del Argentinisches Tageblatt del 4 de Marzo de 1933. Parte del texto:

“Seiscientos mil judíos alemanes en peligro de un pogromo”
“Según el  Daily Mail estamos ante la inminente masacre de 10.000 “Judíos marxistas”
Londres, 3 de Marzo (AP) El “Daily Mail” informa que Alemania están terminados  los preparativos de un pogromo que consistirá en la peor persecución que los judíos han sufrido desde el principio de la Era Cristiana. El diario asegura tener esta información de una fuente absolutamente confiable, pero no la menciona. Agrega que los 600.000 judíos que viven en Alemania se encuentran bajo la amenaza de ser asesinados en un par de horas, ya que el comienzo del pogromo no se demorará más de un par de de días. El diario declara que 10.000 judíos, que en secreto se rotulan como comunistas o marxistas, ya se han designado como víctimas. Cierra con el informe que la intervención de altos círculos es inminente.
Einstein ya no tiene permiso para regresar a Alemania.

Anticipo del sufrimiento de los judíos en el Argentinisches Tageblatt.


Tapa de la “Deutsche La Plata Zeitung” del  11 de Abril de 1938, con una gran foto del festejo realizado en el Luna Park de Buenos Aires, a pocos días de  la anexión  de la “Marca del Este” – que fuera Austria,  después de un golpe de estado que finalmente se afirmó mediante una lisa y llana invasión militar, que desfiló debajo de la ventana de mi dormitorio en Viena….

La  gran manifestación de la Colonia de la Gran Alemania
20.000 compatriotas varones y mujeres se identifican con la Gran Alemania.
( en cerrada unidad se presenta la colonia aleman del Gran Buenos Aires en el Luna Park para apoyar los hecos ocurridos en la Patria (¿? Casi ilegible))

La prensa pro-nazi en Argentina.


La virulencia de esta confrontación puede confirmarse de una informe del embajador Von Thermann al Ministerio de Relaciones Exteriores de la Alemania Nazi:

Informe del embajador Von Therman al Minsitro de Relaciones Exteriores nazi.


Del texto:
“Contra los ataques difamatorios del “Argentinisches Tageblatt” la embajada ya antes de mi asunción del puesto ha protestado repetidamente en forma oral y escrita ante el Ministerio de Relaciones Exteriores local y solicitado la toma de medidas protectoras (véanse informes del 25 de Abril y del 3 de Octubre , Nº 471/33 y 1157/33 ) Como el diario continuó sus inauditos ataques, en los cuales también se ocupaba constantemente de mi persona, también he remitido por mi parte dos notas de protesta al Ministerio de Relaciones Exteriores (Argentino) , de las que agrego adjuntas copias para su conocimiento.  En la próxima oportunidad también abordaré personalmente al Ministro de Relaciones Exteriores sobre este asunto. Me reservo informaciones ulteriores.”
Sobre la relevancia del “Argentinisches Tageblatt” como fuente histórica puedo decir que, casualmente, he encontrado un trabajo de investigación especial de Sebastian Schoepp en la publicación del Institut fuer Zeitgeschichte (un instituto alemán de investigación histórica) sobre la publicación del diario entre 1933 y 1945. Según sus palabras: “hasta ahora (1995) no se había realizado una investigación exhaustiva sobre esta importante publicación en ese periodo por la dificultad de llegar a las fuentes. Ningún archivo alemán tiene una colección completa de la publicación, porque su importación estaba prohibida,….. por lo que solo queda el dificultoso camino hasta Buenos Aires  para estudiar  los  ejemplares, que se van disgregando lentamente, en el archivo de la editorial.]
En una publicación del 30 de Junio de 2001, el Argentinisches Tageblatt publica un homenaje en honor al Dr. Ernesto F. Alemann, su director de aquellos turbulentos tiempos, realizado en el Museo Judío de la Sinagoga de la calle Libertad de Buenos Aires, la primera del rito ashkenazí en la Argentina, con la presencia de directivos de la comunidad y de la Sociedad Pestalozzi, importantes invitados y testigos de la época, destacando su actuación por intermedio del diario y del Colegio Pestalozzi fundado por su iniciativa.

Artículo en el Argentinisches Tageblatt.

Licenciado Roberto Hubscher (exclusivo para Historias Lado B)

REFERENCIAS:
http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%A9cada_Infame
http://www.los-primeros-tecos.blogspot.com.ar/
http://informe-onu.blogspot.com.ar/
http://books.google.com.ar/books?id=SyiyruKIZmYC&printsec=frontcover&dq=e-books+La+matriz+del+infierno+Aguinis&hl=es&sa=X&ei=_mrdUazLHMSfiQLrnIDYBA&ved=0CDQQ6AEwAA
http://de.wikipedia.org/wiki/Heinrich_von_Kaufmann-Asser
http://de.wikipedia.org/wiki/Edmund_von_Thermann
http://en.wikipedia.org/wiki/Argentine_Civic_Legion
http://www.todoexpertos.com/categorias/humanidades/historia/respuestas/490224/legion-civica
http://www.lasegundaguerra.com/viewtopic.php?f=31&t=2397
Vierteljahrshefte Institut fuer Zeitgeschichte - Año 43 (1995) Cuaderno 1 (MFN 1148)
 http://www.ifz-muenchen.de/heftarchiv1995_1.pdf
Archivo Histórico Pestalozzi: registros MFN 937, MFN 943, MFN 599, MFN 585

Colegio Pestalozzi: símbolo de la resistencia contra el nazismo en la Argentina:
PARTE 1:
http://historiasladob.blogspot.com.ar/2012/09/colegio-pestalozzi-simbolo-de-la.html
PARTE 2:
http://historiasladob.blogspot.com.ar/2012/09/colegio-pestalozzi-simbolo-de-la_30.html
PARTE 3:
http://historiasladob.blogspot.com.ar/2012/10/colegio-pestalozzi-simbolo-de-la.html
PARTE 4:
http://historiasladob.blogspot.com.ar/2012/10/colegio-pestalozzi-simbolo-de-la_25.html
PARTE 5:
http://historiasladob.blogspot.com.ar/2012/12/colegio-pestalozzi-simbolo-de-la.html

miércoles, 15 de mayo de 2013

Adolf Eichmann en Israel: la banalidad del mal y un final como cualquier otro...

 
Adolf Eichmann en Israel. (Foto: Revista "Life")


Para Adolf Eichmann, Obersturmbannführer de las sanguinarias y efectivas SS Nazis, los judíos eran simplemente una estadística. Este Teniente Coronel alemán tenía la (dudosa) cualidad de ser uno de los más efectivos a la hora de "cumplir" con esas estadísticas que se le pedían desde la plana mayor alemana durante los oscuros días de la Segunda Guerra Mundial. Eichmann "hacía bien los deberes", pero no sólo eso, sino que además fue uno de los arquitectos generadores del perfecto funcionamiento de la terrible maquinaria que hizo posible el Holocausto. Eichmann, mal que le haya pesado en algún momento decisivo y final de su lamentable vida, no sólo ha sido un eficaz ejecutor de las nefastas políticas de deportación y exterminio de millones de personas, sino que además disfrutó siendo uno de los más directos responsables por su concepción. Aportaba ideas, planificaba, proponía salvajada tras salvajada más allá de lo que le pedían. En eso fue uno de los "mejores".

Con la Guerra Mundial llegando a su fin (¿llegó?) los "inocentes" norteamericanos no advirtieron que Eichmann era en realidad uno de los criminales de guerra más peligrosos, un asesino serial que pretendió adquirir inmundos visos de legalidad, resguardándose en la insostenible y obscena "obediencia debida". Llegado el año 1946 escapó de la "custodia" (entre comillas...) del ejército de Estados Unidos y como quien no quiere la cosa, tras ocultarse (no sin protección aliada) en diferentes partes de Alemania, obtuvo un salvoconducto que le permitió escapar hacia Argentina, cosa que sucedió recién en 1950. Llegó desde Génova, Italia, con pasaporte provisto por la Cruz Roja Internacional (¿fue creada por un suizo, no?...) y así las cosas logró establecerse en Buenos Aires y ocuparse de varias cosas bajo el falso nombre de Ricardo Klement.
El 1° de mayo de 1960, tras largos años de incógnito y protección en Argentina, un comando israelí del Mossad comenzaba (por un lado) a violar la soberanía jurídica de Argentina y las normas internacionales y, de paso (por otro lado) comenzaba a cumplir con un acto de estricta justicia para muchos. Los "Nokmin" (Vengadores) israelíes comandados por Rafael Eitan finalmente lograron el cometido de capturar a uno de los nazis más buscados el 11 de mayo de 1960 en la localidad de San Fernando, Buenos Aires (Argentina). Lo demás es historia y tras un juicio con "veredicto cantado" Adolf Eichmann fue ahorcado en la prisión de Ramla, Jerusalen (Israel) durante la madrugada del 31 de mayo de 1962.

La historia lado B, que siempre la hay, nos muestra gracias a las sensacionales e impactantes fotografías de la Revista "Life" que todo el poder, toda la arrogancia, la altanería, la mentira, el crimer sistematizado y organizado, todo el salvajismo, la insensibilidad y las ansias de dominación eterna y total de otros tiempos, duraron lo que un suspiro dentro de una canasta... : la nada misma. Eichmann antes de sentir la soga al cuello, tuvo sin embargo tiempo para vomitarle al mundo unas cuantas palabras más. Dijo en aquella oprtunidad: "Larga vida a Alemania. Larga vida a Austria. Larga vida a Argentina. Estos son los países con los que más me identifico y nunca los voy a olvidar. Tuve que obedecer las reglas de la guerra y las de mi bandera. Estoy listo."

Pero claro, antes había tenido que bajar la cabeza y calladito la boca, sumiso, fue un prisionero más. Lo mismo que le había exigido alguna vez a millones de víctimas. Eichmann, en esa cárcel, era casi una "estadística" más. Un de aquellas "estadísticas" que él, tan solícitamente, gustaba recopilar y engrosar...
Todo llega...

 Adolf Eichmann en la prisión de Ramla (Jerusalen). (Fotos: Revista "Life")



domingo, 28 de abril de 2013

Cae la noche: el Anschluss por Roberto Hubscher en primera persona

Roberto Hubscher comparte con Historias Lado B su relato en primera persona recordando los lejanos y oscuros días que derivaron en la anexión de Austria al Tercer Reich. El "Anchluss" dejó su huella de atropello y violencia descomunal, símbolos de la barbarie nazi. La gente de bien, los ciudadanos comunes sufrieron las consecuencias y muchas historias cambiaron para siempre. Ésta es una de esas historias.

Roberto Hubscher y Gerda. Austria, 1938.


Cae la noche.
En 1933, cuando yo nacía, los nazis, con Adolfo Hitler a la cabeza, tomaron el poder en Alemania y comenzaron la persecución de todo lo que no era "alemán" y "ario" según sus propios conceptos, incluyendo principalmente a los judíos. En Austria, en el mismo año, el canciller Dollfuss prohibió el partido nacionalsocialista y las milicias socialistas.
Al año siguiente se promulgó una nueva constitución, proclamando a Austria un estado "corporativo, autoritario, cristiano-alemán". A mediados de año Dollfuss fué asesinado en un golpe de estado por una conjura nazi destinada a unir a Austria con Alemania, unión que fracasó por la oposición de la Italia fascista en una puja de poder en el escenario europeo.
Pero los austríacos siempre se sintieron más alemanes que los mismos alemanes, al igual que ellos temían a los comunistas soviéticos y, en parte, tenían arraigados sentimientos xenófobos y antisemitas a pesar de siglos de tolerancia de los emperadores austro-húngaros.

Una visión siniestra.
Era una fría mañana del final del invierno, cuando un ruido inusual me despertó. Sordo pasos golpes rítmicos se oían llegar desde la calle. Me levanté, me acerqué a la ventana de mi pieza, que daba a la Obkirchergasse, y espié a través de las cerradas persianas de tablillas inclinadas de madera.
Alineados en filas que cubrían el ancho de la calle, marchaban. Cascos de acero verdes, chaquetas verdes, botas, cargando armas extrañas con caños exteriores perforados como una tela a lunares. Marchaban y continuaron marchando durante largo rato, soldados y mas soldados, en dirección a la Grinzinger Allee y al parque que yo frecuentaba. Yo estaba solo en mi pieza. Nadie me dijo nada y yo no creo haber preguntado nada. Para mi inocente mente de niño, esta marcha solo era una vista inusual, extraña, pero no implicaba ninguna sensación de temor o peligro. Era el 12 de Marzo de 1938: las fuerzas de la Alemania nazi habían entrado en Viena y ello, sin que yo pudiera intuirlo, marcaba un quiebre en mi destino y el de mi familia.

El brusco e inusitado fin de una amistad.

Al día siguiente, como era un hábito frecuente, fuimos con mi madre al parque y yo me dediqué a jugar en el arenero con mi amiga Gerda. En eso estábamos cuando oímos música de marcha, pasos acompasados y un entusiasmado griterío. Miramos y vimos una compañía de soldados alemanes, marchando solemnemente y con sus armas al hombro, por la avenida que bordeaba el parque. Atraídos por el bullicio y el espectáculo, corrimos de la mano hasta el borde del parque, donde se había reunido un considerable grupo de gente que, levantando el brazo derecho en el saludo nazi, gritaba "Heil Hitler!" vitoreando a las fuerzas que pasaban. Mi amiga Gerda se alineó con los demás y, a cual más entusiasta gritaba con ellos. En mi inocencia, me uní al coro, saludando y gritando al unísono con mi amiguita y todos los demás. Cuando es eso estaba, repentinamente apareció mi madre y, sin proferir palabra, me tomó de la mano, me alejó de allí y me llevó a casa. Esa fué la última vez que ví a Gerda y nunca más supe nada de ella.

Se aprueba la anexión de Austria al Tercer Reich.


Adiós Austria, viva la Marca del Este!
El 11 de Mayo de 1938 las tropas alemanas terminaron de ocupar toda Austria y, mediante un plebiscito, se confirmó la anexión, transformando la República de Austria en la Marca del Este del Reich alemán, que iba a durar 1000 años.
Los acontecimientos ocurrieron en rápida sucesión, aunque yo no fuí plenamente conciente de ellos. Sin embargo, algunos documentos  y  cartas de mis padres a mis abuelas en Austria y Polonia complementaron los pocos recuerdos propios de esta etapa.
Una de las consecuencias casi inmediatas afectó la situación laboral de mi padre y supongo que también a la de mi abuela.
   
Incautación.
Los dueños de la empresa donde trabajaba mi padre eran judíos. Según me contaron, un buen día apareció en la oficina del directorio un señor muy marcial y elegante, con un botón con la cruz esvástica en el ojal del saco, y saludó diciendo: "Señor Director General, su empresa ha sido expropiada. Puede quedarse aquí si lo desea, pero de ahora en adelante las decisiones las tomaré yo". Por supuesto, el director y propietario, Ludwig Klausner, no se quedó. Fué encarcelado pero, afortunadamente, consiguió liberarse, probablemente por el pago de una considerable suma de dinero, y, al poco tiempo, emigrar a Suiza, para luego viajar a Londres.
Mi padre recibió en su oficina una notificación, que ha llegado a mis manos:
"Del-Ka Industria del Calzado SAIC"
"Sr. Procurador José Hübscher"
"En esta casa".
"26.4.1938"
"Por la presente rescindimos la relación laboral existente entre nosotros a partir del próximo plazo mínimo prescripto por ley, o sea a partir del 31 de Julio de 1938.
Con nuestra mayor consideración
Del-Ka Industria de Calzado
(firmado con sello) Starke" .
La carta de recomendación extendida por la empresa da idea de la importancia de la posición de mi padre y de la holgada posición y seguridad futura que los nazis nos robaron a mis padres y a mi.
"Del-Ka Industria de Calzado SAIC. Dirección General, Viena VI, Mariahilferstrasse 47.
"Constancia por la que se certifica que el Sr. José Hübscher ha entrado a nuestro "servicio el 1. de Abril de 1927 y estuvo activo en nuestro establecimiento hasta el 30 de "Junio de 1938. El citado Sr. estuvo a cargo de la organización y control comercial, "financiero y administrativo de la central en Viena, los locales de venta en Viena y nuestras "sucursales en la provincia, así como de todas nuestras afiliadas extranjeras.
"El Sr. Hübscher ha realizado las tareas a el encomendadas a extraordinaria satisfacción "aún en situaciones ocasionalmente muy dificultosas, gracias a sus especiales condiciones "de organización, sus ricos conocimientos en el campo de nuevos métodos de cálculo, "supervisión empresaria y contabilidad financiera. En el trato con proveedores y clientes se "ha mostrado competente y confiable. Especialmente destacable es que es digno de la "mayor confianza. Podemos recomendar calurosamente al Sr.Hübscher para el desempeño de cualquiera de "las tareas enumeradas y le deseamos buenos éxitos para su trayectoria futura."
Cabe preguntarse si el último párrafo fue realmente sincero o si se trataba de un sarcasmo, teniendo en cuenta que en esos días era inadmisible que un judío pudiera obtener un puesto semejante en los países germano-parlantes.


Las tropas alemanas ingresan en Austria. 1938.


Un judío no es un ciudadano digno; que se vaya.   
Aunque mi padre estaba aún en edad de ser reclutado, dado que, por suerte, era "indigno" que un judío sirviera en las fuerzas armadas del Reich, fue eximido del servicio, quedando libre (?) para emigrar, según reza un certificado que también ha llegado a mi poder.

"Comando del distrito militar de Viena, 10 de Agosto de 1938
"A José Hübscher, nacido el 4.2.1900 en Zalszczyki, domiciliado en Viena XIX, "Obkirchergasee 42, se le certifica que, de acuerdo a los documentos presentados, es judío "completo y, de acuerdo al WG#15, no puede prestar servicio militar. Por parte del "Comando Militar no hay objeciones para su emigración."
   
Preparativos para la partida.
Sin demora, mis padres comenzaron los preparativos para abandonar Austria. En esa temprana época todavía era posible llevarse muebles, utensilios y ropa, por lo que se preparó todo lo posible para embalarlo. En esa época, en que los contenedores aún no se habían inventado, se estibó todo lo posible en un gran cajón cúbico de unos 3 o 4 metros de lado, que luego, al conocer nuestro destino definitivo, se despachó por una compañía transportadora.
Como solo estaba permitido llevar 20 DM ( unos 8 dólares ) en efectivo, mi padre pagó todos los pasajes y transportes antes de salir. Como todavía quedaba algo de dinero, decidió comprar algunas cosas de valor que pudiera llevar y que fueran medianamente convertibles en caso necesario.
Así fue que una tarde salí con mi mamá al centro, a una platería cuyo dueño era el cuñado de un tío de mi papá. Era un negocio relativamente pequeño, con las vidrieras y estanterías forradas con terciopelo rojo y llenos de los mas variados artículos de reluciente plata. Los nazis aún no habían pasado por allí: de lo contrario mis parientes ya no habrían estado en el negocio. Compramos un juego completo de cubiertos de plata y tres importantes candelabros, uno de ellos para tres velas montado en un pedestal cuadrado con una efigie de león en cada cara. Estos candelabros aún suelen adornar mi mesa en los días de fiesta.

 Casa natal de Roberto Hubscher en Viena. 2009. Arriba izq.: Roberto Hubscher (Abril 2013)


Hacia dónde?
Mi padre con una clara visión del futuro, trataba de acelerar lo mas posible nuestra partida. Si bien teníamos ya muchos parientes en Estados Unidos, en ese momento la emigración hacia ese país ya era muy dificultosa. Recuérdese la odisea del barco de refugiados judíos que partió de Hamburgo y que, después de recorrer puertos de varios países, incluyendo el de Nueva York, tuvo que regresar pues nadie autorizó el desembarco de los refugiados judíos. Cuando volvieron fueron despachados a campos de concentración en Alemania y Polonia.
Para obtener una visa de ingreso a EE.UU. había que obtener un "afidávit" (garantía) que debía ofrecer un residente norteamericano con holgada situación económica, lo que no era el caso de nuestros parientes, que trataban de conseguir amigos que se prestaran a ayudar a sus familiares a huir de la persecución racial.
Por ello, mi padre trató desde el principio de obtener visas para la Argentina por medio de una "llamada", ya que aquí ya residía hacía 10 años mi tío Adolfo. Pero en esa época había muchos filo-nazis en el gobierno argentino y era muy difícil obtener un permiso de emigración a la Argentina. Finalmente, después de una angustiosa espera, el 5 de Septiembre de 1938 obtuvimos las visas para mis padres y para mí, las últimas que emitió el consulado argentino en Viena. Mi abuela materna no pudo ser de la partida. Según escribe mi abuela Ietty en una carta de Mayo de 1939 desde Polonia, recordaba que mi padre había pagado desinteresadamente los gastos del viaje de mi tío Adolfo a Argentina en 1927 y que, gracias a eso, ahora podía retribuirnos en la situación de gran necesidad, salvándonos del exterminio. Escribe mi abuela: "Bendito sea Dios que he educado hijos que pueden vivir tan bien entre personas que ayudan a mis hijos; el Todopoderoso los recompense. (...) Bendito es el Gran Dios, que Adolfo consiguió sacarte a tiempo, eso es como escapar de la muerte."
Dos días más tarde, el 7 de Septiembre, llegábamos por ferrocarril a Trieste (puerto de Italia más cercano a Viena) y al día siguiente embarcábamos en la motonave Oceanía.
Cuando ya estábamos a bordo, llegó un telegrama de mi abuela informándonos que el consulado suizo nos había otorgado una visa de tránsito por 10 días, pensada para eventualmente seguir a Inglaterra, ruta que habían seguido muchos fugitivos judíos.
Pero la suerte ya estaba echada: para bien o para mal, nuestro destino sería la Argentina.

Roberto Hubscher
Exclusivo para Historias Lado B.

Datos biográficos de Roberto Hubscher:
Roberto Hübscher nació en Viena, Austria, el 13 de Abril de 1933. Su familia era originaria de la Galitzia del antiguo imperio austro-húngaro, que luego fue polaca y hoy forma parte de Ucrania. Insólitamente, sus ancestros paternos parecen haber llegado de España.
Reside en Buenos Aires, Argentina, desde 1938. Hizo aquí sus estudios y ejerció su profesión de Lic. en Química hasta, finalmente, retirarse en el año 2006. Actualmente trabaja en el armado del archivo histórico del Colegio Pestalozzi de Buenos Aires.

martes, 5 de marzo de 2013

Perón y la "materia gris" alemana en Argentina

Juan Domingo Perón.


Hablar sobre Juan Domingo Perón es hablar de uno de los más grandes y emblemáticos políticos/militares de la historia argentina. Su huella y su impronta son, aún hoy en día, innegables e imborrables, con todo lo bueno y todo lo malo que ello conlleva. Perón sabía lo que quería y aunque en la mayoría de los casos sus acciones tuvieron una relativamente buena intención y redundaron en ciertos beneficios para la masa trabajadora, su plan era defonitivamente otro: el poder absoluto. Hacer de la República Argentina una potencia política, económica, tecnológica y militar que emulara (y le hiciera sombra) a las naciones fascistas y nazis de la vieja Europa a las que él mismo tanto admiraba.
Con esa idea en mente el caudillo argentino se propuso rearmar aquel mundo populista, demagogo, industrial y militarista con lo que iba quedando de Alemania (que no era poco) tras el final de la Segunda Guerra Mundial. Perón "leía" muy bien el mapa geopolítico de entonces, era capaz y lo suficientemente inteligente (desde su óptica y la de sus seguidores) como para hacer que el maltrecho Ave Féniz "alemán" reviviera de entre las cenizas de la Alemania nazi vencida (sólo en los campos de batalla) por los Aliados y así las cosas se propuso firmemente recuperar (para su beneficio y su intento de eternización política y militar) "todo lo bueno" que pudiera aportar Alemania para la Argentina y toda la región...
Las circunstancias obligaron a Perón a acordar con los nazis el "traspaso" de todas aquellas "cosas buenas que pudieran aportar" para el entonces Granero del Mundo (tal como se la llamaba a la Argentina). Perón comunicó secretamente a los nazis que Argentina les declararía (falsamente) la guerra (sobre el mismísimo final de la contienda) y de inmediato, tras esa cortina de humo y millones, se comenzaron a tejer las redes de la nefasta organización Odessa, con la inestimable colaboración y protección de parte de Perón. El líder argentino fue fundamental a la hora de lograr el escape de los nazis de la Europa destruída y brindar protección total e impunidad para ellos en esta nueva tierra que los recibía tan afectuosamente. Todo lo demás es para otra historia, pero lo concreto es lo que pensaba Perón, cosa que se encargó de transmitir y dejar bien en claro...

Ésto decía Perón por aquel entonces:

"Mucho antes que terminara la guerra, nosotros nos habíamos preparado ya para la posguerra. Alemania estaba derrotada, eso lo sabíamos. Y los vencedores se querían aprovechar del enorme esfuerzo tecnológico que había hecho ese país durante más de diez años. Aprovechar la maquinaria no se podía porque estaba destruída. Lo único que se podía aprovechar eran los hombres. A nosotros también nos interesaba eso. Les hicimos saber a los alemanes que les íbamos a declarar la guerra para salvar miles de vidas. Intercambiamos mensajes con ellos a través de Suiza y España. Franco entendió de inmediato nuestra intención y nos ayudó. Los alemanes también estuvieron de acuerdo. Cuando terminó la guerra, esos alemanes útiles nos ayudaron a levantar nuestras fábricas y a mejorar las que ya teníamos. Y de paso, se ayudaron a ellos mismos..."

domingo, 13 de enero de 2013

Por dudosa "falta de espacio" Argentina incineró en 2008 todos los archivos sobre el ingreso de nazis al país


La relación de la Argentina con los criminales de guerra nazis ha dado mucha tela para cortar a lo largo de los años. Lejos, muy lejos, de ser leyenda o mera historia fantástica, la plácida vida en esta parte de Sudamérica de los jerarcas relacionados al Tercer Reich, roza lo macabro y de alguna manera pinta de cuerpo entero el pensamiento y las políticas (que aún en tiempos tan recientes como el año 2008) siguen contaminando las mentes de muchos.
Han sido décadas y décadas de apoyo sistemático, de simpatías profundas, de encubrimiento descarado y de asilo "desinteresado" a muchos de los responsables de crímenes contra la humanidad, quienes han logrado sobrevivir a la Segunda Guerra Mundial y que han podido ingresar a la Argentina desde (incluso) antes de terminar la contienda bélica, sin el más mínimo inconveniente y con más de un beneficio. El apoyo oficial de Argentina y sus gobiernos (fundamentalmente los de las décadas de los años '30 y '40 y muy particularmente los dos primeros gobiernos de Juan Domingo Perón), no han caído en saco roto y si para muestra faltaba un botón entonces habrá que hablar de la quema de los expedientes que documentaban (y dejaban al descubierto) la entrada de los nazis a la Argentina y las responsabilidades que les cabían a las autoridades de entonces.

En marzo de 2008 se informó tímida, escueta y descaradamente a la opinión pública que los expedientes relacionados con el ingreso de nazis a la Argentina desde la década de 1940 se habían incinerado "por falta de espacio" en las dependencias oficiales en las que se encontraban archivados. Para que "el trabajito" fuera completo, también se arrojaron a las llamas (por las dudas) todos los documentos relacionados con otro tipo de "inmigrantes" llegados a la Argentina entre los años 1946 y 1952. 
La tarea de quemar documentos tan importantes como los que demostraban responsabilidades y complicidades oficiales sobre la ayuda a los nazis en la Argentina, recayó sobre la Dirección Nacional de Migraciones de Argentina, una dependencia directa del Ministerio del Interior, por aquel entonces (y en la actualidad) bajo el mando de Florencio Randazzo. 
Algunos pocos expedientes (supuestamente) se han conservado, vaya uno a saber bajo qué criterio de selección, pero la mayoría de los documentos ya son, tan sólo, ceniza en el viento.

Los responsables del área se despacharon muy sueltos de cuerpo por aquel entonces sobre el tema en cuestión agregando además (como si fuera poco) que la documentación sobre los nazis en Argentina que no ha sido quemada, fue (pese a su importancia) "regalada como papel usado"...

En pleno Siglo XXI, en la era de los archivos digitalizados y con la posibilidad de conservar semejante tipo de documentación sin la necesidad de grandes espacios, Argentina optó por "la más fácil" (sobre todo a la hora de encubrir responsables y tirar la tierra debajo de la alfombra)... Criminales (más de 7.000 ingresados) como Erich Priebke (aún vivito y coleando); Ante Pavelic, Gregor Helmut, Adolf Eichmann y hasta el mismísimo Josef Menguele, (por no nombrar a otros "peso pesado" como Martin Bormann y hasta Adolf Hitler) agradecidos a la Argentina por los servicios prestados...