jueves, 24 de mayo de 2012

El castillo de Wewelsburg: centro del ocultismo de las SS al que ni siquiera Adolf Hitler se atrevió a entrar jamás...

Castillo de Wewelsburg.

Wewelsburg es un castillo ubicado en el estado de Renania Norte-Westfalia, en el pueblo del mismo nombre, ubicado en las alturas del valle del río Alme. Se trata de una construcción que data de la época renacentista, de planta triangular, de una belleza y una imponencia no fáciles de encontrar y describir. Desde lo alto, con toda su majestuosidad, mira al mundo "inferior" copiando a la perfección lo que sucedía en su interior desde el año 1934. El castillo de Wewelsburtg estaba destinado a ser, ni más ni menos que, el Centro del Mundo... y el mentor de esa terrorífica idea era ni más ni menos que Heinrich Himmler, el nefasto jefe de las SS alemanas del Tercer Reich.

Himmler haciendo de las suyas en las inmediaciones del Castillo de Wewelsburg.



Todo comenzó asi...
Karl Maria Wiligut relató en 1934 a Himmler una historia que marcaría a fuego las decisiones del nazi a partir de entonces. Wiligut le contó a Himmler la vieja leyenda de "La batalla del Abedul", la cual relataba una gran batalla final entre el gran ejército del este siendo derrotado por el ejército del oeste. Wiligut le predijo algo más a Himmler: el castillo de Wewelsburg sería el último bastión de esa batalla final por el poder mundial y Himmler "compró" esa idea. No sólo la idea compró, sino que además firmó un arrendamiento por 100 años con el distrito de Paderborn para quedarse con la fortaleza.
Pero Himmler no sólo hacía caso a la leyenda referida al castillo en sí mismo. Las áreas linderas también eran ricas en historias que agigantaban el sentimiento interior de los nazis y en especial de Himmler con todo su costado esotérico. La creencia popular sostenía que en los alrededores del castillo de Wewelsburg había tenido lugar la batalla en la que las tribus germánicas unidas vencieron a las legiones de Varo, logrando establecer nada más y nada menos que las fronteras definitivas entre el Imperio Romano y el Imperio Germánico.

En el recinto interno del Castillo de Wewelsburg.



Himmler ostentaba en público una imagen acartonada, fría y despojada de toda pasión, pero en realidad el jefe de las SS albergaba en su tan intrincado interior el placer por esa conjunción entre lo histórico y lo místico. El castillo de Wewelsburg resultaba entonces el sitio ideal para que instalara allí su cuartel general de las SS, una Orden Negra de oficiales que, curiosamente, prácticamente nunca fue visitada por Adolf Hitler. Eso se cree.
Si Hitler y el Partido Nacional Socialista habían suplantado a la Iglesia, Himmler apuntaba a lograr lo mismo con el Cristianismo reemplazándolo por una religión de estado pseudo pagana inspirada básicamente en una visión idealista de la prehistoria germana, haciendo énfasis en la pureza racial y la innata superioridad del pueblo alemán.

El castillo de Wewelsburg y la orden de oficiales de las SS que allí se reunían fueron la avanzada de esa nueva religión que incluyó rituales paganos, la adoración del sol y la naturaleza entre otros. La escuela que Himmler pretendió implementar en Wewelsburg también incluía hacer hincapié en los siguientes temas: prehistoria, historia medieval y folclore germano, creación de una biblioteca de las SS y la conformación de una visión nacionalsocialista del mundo a partir del lugar en el que está implantado el castillo.
A partir de 1936 Himmler decide ampliar las instalaciones y convertir definitivamente al lugar en el centro ideológico de las SS o, lo que era aún más ambicioso y demencial: el lugar debía convertirse en el centro del mundo. En varios de los enormes recintos, el castillo albergaba piezas de profundo valor no sólo histórico, sino además esotérico, con gran significado para esa secta oscura lidearada por Himmler. Según relatan algunos, la punta de la lanza de Longinos (la misma que se clavó en el costado de Jesús en el momento de la crucifixión) y otros destacados elementos adornaban las vitirinas que eran objeto de adoración fanática por parte de Himmler y los suyos.

La sala reservada a la "elite de los caballeros" del Castillo de Wewelsburg (arriba). El castillo desde afuera (abajo).


La locura de Himmler, el fanatismo por el ocultismo, el misterio y la búsqueda desenfrenada del poder mundial y de (en definitiva) dominar a todo y a todos lo hizo ir tan lejos como en este caso. El castillo de Wewelsburg albergaba en sus entrañas a una especie de logia o de orden de "caballeros oscuros" destinados (por ellos mismos) a ser los nuevos dioses de la nueva religión.  En un recinto oscuro y lúgubre hacían de las suyas. El mismo recinto al cual ni siquiera el mismísimo y nefasto Adolf Hitler se atrevió a entrar alguna vez... y eso es mucho decir.

martes, 22 de mayo de 2012

La curiosa frontera entre Corea del Norte y Corea del Sur

Curioso y muy particular el mundo en que vivimos. 
Si hay un sitio de alta tensión en este planeta, ese debe ser la explosiva frontera entre Corea del Norte y Corea del Sur, pese a lo cual, semejantes enemigos mortales están divididos por una delgadísima línea de cemento. 
De un lado los del norte, del otro los del sur, tan cerca y tan lejos a la vez.
Los del norte (enemigos de los colonialistas Estados Unidos y Corea del Sur) le dan la espalda a la "Corea enemiga", también para ver si a alguien se le ocurre la poco recomendable idea de traspasar la frontera y escapar.
Por su lado, los del sur ("acompañados" por soldados norteamericanos omnipresentes) siempre miran al norte para divisar, llegado el caso, si es que algún "rojo" se atreve a avanzar hacia el sur. 
Una verdadera curiosidad, digna de otros tiempos, lejos de la tecnología, satélites espía, radares sensibles y certeros misiles a distancia. 
Ahí nomás, uno frente al otro, no se quitan la mirada de encima, en un ritual guerrero sin igual.

domingo, 6 de mayo de 2012

Francoise Holland, nuevo presidente de Francia, en reunión masónica del Gran Oriente

Mientras los ciudadanos del mundo celebran y festejan los "cambios" que están por venir tras cada elección presidencial de la que toman parte... el hilo conductor del poder mundial sigue siendo movido por quienes están llamados a cumplir estrictamente un plan. Vaya uno a saber cual...
En el video vemos a Francoise Holland, elegido el 6 de mayo de 2012 como nuevo presidente de Francia por el partido socialista, en una reunión de la Gran Logia Masónica de Oriente en el Templo Arthur Groussier llevada a cabo el 22 de noviembre de 2011. Los masones, nuevamente al poder...


jueves, 3 de mayo de 2012

Los nazis siguen en Bariloche


Bariloche, Argentina, provincia patagónica de Río Negro, una ciudad maravillosa y llena de sorpresas que, lamentablemente, no siempre vienen de la mano de los paisajes naturales bellos como pocos en el mundo. Esa belleza contrasta enormemente con la "fama" que se ha hecho (o ganado) la ciudad del sur de Argentina. Desde hace muchos años, décadas enteras, el fantasma (y algo más) de muchos jerarcas, adeptos, simpatizantes y seguidores del régimen nazi ha sobrevolado el ambiente del lugar y no siempre se le ha dado debido crédito a las historias y relatos (más allá de las pruebas contundentes) que dan cuenta de la concreta presencia de gente de esa calaña en Bariloche y sus alrededores.

La foto de este post sigue siendo lamentablemente un frío testigo de la simpatía que reina en esa hermosa ciudad turística de Argentina por la ideología que tanto daño le ha hecho a la humanidad. No hay que ser un genio ni un adivino para advertir el diseño que se forma en el centro de ese emplazamiento en la "Galería del Sol" en pleno centro de la ciudad ... El mensaje parece muy claro: ahí estuvieron... y ahí están.

miércoles, 2 de mayo de 2012

11 de 17 Cardenales alemanes le retiran el saludo al Papa Benedicto XVI

Que la Iglesia Católica Apostólica Romana como institución terrenal está en problemas, eso ya nadie lo duda. Desde hace siglos las cosas que deben cambiar no cambian y viceversa y así las cosas tras los muros (gruesísimos) del Vaticano, el Estado político más pequeño del planeta, hay voces que no se escuchan con claridad... Y si no se escucha con claridad, entonces un gesto vale más que mil palabras. El 22 de septiembre de 2011, el Papa Benedicto XVI fue a Berlín, Alemania, un lugar que a priori debería haberlo recibido con los brazos abiertos. No sólo que no ha sido así, sino que además lo ha recibido con la mano cerrada de 11 de los 17 Cardenales alemanes que formaban parte del "comité de recepción y bienvenida". Ni siquiera Tarcisio Bertone, Secretario de Estado del Vaticano, extiende su mano al principio de la fila...¿Celibato in eternum? ¿Mujeres excluídas del sacerdocio desde hace siglos? ¿infalibilidad papal? ¿Vista gorda ante los abusos sexuales? Muchos reclamos. De esos 17 Cardenales, uno intenta retirarle el saludo y ante la duda, opta por ser políticamente correcto, pero los demás.... Mirá el video...

lunes, 30 de abril de 2012

Prescott Bush, el gran socio norteamericano de Adolf Hitler

Prescott Bush

Mientras la segunda guerra mundial cobraba fuerza y producía muerte y devastación, no eran pocos los que sacaban provecho de uno de los peores conflictos armados de la historia. Prescott Bush era uno de esos personajes que, desde las sombras y tras una fachada de legalidad, se dedicaba a hacer negocios siniestros incluso con... el "máximo enemigo" (bien marcadas esas comillas) de los Estados Unidos.
Este hombre, padre de George Bush y abuelo de George W. Bush (ambos presidentes del país del norte) era uno de los grandes aportantes a la causa de Adolf Hitler. Es que a medida que las necesidades de la Luftwaffe (la fuerza aérea alemana) se iban incrementando, Prescott Bush se encargaba de hacer que la cosa fuera más sencilla para el Führer alemán.
Bush pertenecía a una poderosa empresa petrolera que no vio ningún inconveniente para suministrar todo el combustible necesario para que los aviones alemanes surcaran los cielos llevando su lluvia de fuego y muerte sin igual. El gobierno norteamericano tras hacer "la vista gorda" durante largo rato, finalmente actuó su mejor jugada y sancionó económicamente a Prescott Bush por haber violado la "Trading with Enemy Act" (Acta de Comercio con el Enemigo), cosa que no afectó en absoluto los planes de Bush de seguir suministrando combustible salido de su compañía petrolera en Texas a la aviación nazi que devastaba por entonces prácticamente a medio continente europeo.

Prescott Bush se había visto con el camino allanado para hacer de las suyas ya desde 1926, cuando se colocó al frente de la Union Banking Corporation (UBC), al tiempo que (también desde ese mismo año) era nombrado vicepresidente del poderoso grupo económico Brown Brothers Harriman. Su presencia clave y estratégica permitía que el grupo hiciera además las maniobras necesarias para el envío de enormes sumas de dinero hacia un lado y otro del Océano Atlántico. El dinero viajaba desde Estados Unidos hacia la Alemania nazi para que nada faltara allí y que todo lo necesario para sacar a relucir la infernal máquina de guerra estuviera en su lugar, y también el dinero llegaba al país de la libertad proveniente de Alemania, triangulando previamente con los Países Bajos (no vaya a ser que la cosa fuera tan evidente). Todos contentos: los nazis con Hitler a la cabeza porque nada les faltaba de esa manera y Bush y sus socios... porque a ellos tampoco nada les faltaba.
Claro que Prescott Bush no estaba solo en su afan de ayudar denodadamente a Hitler: también lo acompañaban en la noble tarea la Standard Oil y el Chase Bank de la familia Rockefeller...
Al fin y al cabo, los enemigos no eran tan enemigos... eran socios.

domingo, 15 de abril de 2012

German American Bund: el partido Nazi y su máxima expresión en la tierra de la libertad

La "German American Bund" por las calles de New York en 1939.


Los Estados Unidos de América son (¿son?) la tierra de la libertad... Eso desde siempre ha sido así, establecido como una verdad incontrastable, pero ya se sabe que siempre hay un lado B de la historia y entonces será bueno recordar lo que se daba muy habitualmente durante la década de los años '30 en el país que hace las veces de policía del mundo y que nos dice qué cosas están bien y qué cosas están mal...
La "German American Bund" es una de esas manchas que, aún hoy en día, no pocos quieren borrar. Pero no se puede.

El Partido Nacional Socialista tuvo desde 1930 muy buenos amigos y muy buena propaganda en los Estados Unidos. En 1930 nació la "Federación Americana de Alemanes" y en 1933 se creo la organización "Amigos de la nueva Alemania", para pasar a ser luego en 1936 la "German American Bund", liderada por Fritz Julius Kuhn, quien aseguraba que había sido el mismísimo Adolf Hitler quien lo había nombrado como el "Fuhrer americano"...


La "German American Bund" por las calles de New York en 1939.


Las actividades de la "German American Bund" estaban destinadas, lisa y llanamanete, a dar "buena prensa" al partido nazi alemán en suelo norteamericano y no eran precisamente pocos los que agradaban de la idea y comulgaban en esa celebración pagana y vomitiva. Las manifestaciones de la "German American Bund" eran algo masivo, multitudinario y en consonancia estética con los grandes mitines de la Alemania de Hitler.

Una multitud en un meeting nazi en los Estados Unidos. George Washington, presente...

Las imágenes de este post son más que elocuentes... de nos ser por la presencia de la bandera de las "Barras y estrellas" (por no mencionar las imágenes de George Washington en los estandartes...) podríamos creer sin temor a equivocarnos que lo que allí sucedía tenía como escenario las calles de Berlín... Sin embargo, las fotos corresponden a las reuniones de los simpatizantes de la Alemania nazi en diferentes lugares del territorio de Estados Unidos... Un "espectáculo de pésimo gusto y nulo criterio" a la vista de todo el mundo en la tierra de la libertad... Difícil de entender (o no tanto...).
Señoras y señores, las fotos de la  "German American Bund" en acción, con toda su fuerza bruta en los Estados Unidos en los años '30...


La "German American Bund" vivita y coleando en la tierra de la libertad.

jueves, 12 de abril de 2012

El día que le soltaron la mano a Kennedy...


El 22 de noviembre de 1963 debía ser uno más en la vida de John F. Kennedy, por entonces presidente de los Estados Unidos, pero no ha sido así. Durante el transcurso de aquella jornada se produjo el magnicidio que aún hoy genera dudas... las mismas dudas que afloran tras ver la actitud del jefe de seguridad presidencial instantes antes de los fatídicos disparos... A buen entendedor, pocas palabras. Mirá el video.


domingo, 8 de abril de 2012

La Torre Bustillo: ¿un puesto de vigilancia para proteger a Hitler en Bariloche?

La misteriosa Torre Bustillo a orillas del lago Nahuel Huapi.

El Arquitecto Alejandro Bustillo, debe haber sido la persona que mejor supo interpretar a Bariloche. Sus construcciones son la esencia misma de la ciudad que reposa a orillas del Lago Nahuel Huapi en la patagónica provincia argentina de Río Negro. Entre esas construcciones podemos destacar al famoso hotel Llao-Llao y la Catedral de la ciudad, pero hay una construcción que resulta de lo más misteriosa (incluso hoy en día) para los habitantes del lugar: La Torre Bustillo o, como también se la conoce, la Torre Sarracena.

Esta torre, construída en estilo medieval, genera muchos comentarios y es el centro de numerosas leyendas y especulaciones, pero hay una teoría (conspirativa) que es la que más interés produce a quienes procuran información y datos sobre esa misteriosa construcción. La Torre Bustillo se encuentra emplazada en la Península San Pedro, en un lugar muy estratégico como para haberse elegido por casualidad...
La península se encuentra a mitad de camino (aproximadamente) entre la ciudad de San Carlos de Bariloche y Villa La Angostura, sitio en el que (casualmente) se encuentra la residencia Inalco, el hogar de Adolf Hitler en la Patagonia Argentina...

La Torre Bustillo vista desde el lago Nahuel Huapi.


La inquietante torre es prácticamente inaccesible en nuestros días, es más, no muchos habitantes de la zona saben de su existencia o la han podido ver siquiera, sobre todo porque está emplazada dentro de una propiedad privada en la actualidad, al borde de un altísimo peñasco al que prácticamente es imposible llegar (incluso es muy difícil de ver).

Mientras tanto la leyenda y algunos otros comentarios con un poco más de fundamento, siguen circulando y dicen que esa torre era en realidad un puesto de vigilancia que advertía sobre el paso de embarcaciones por el Lago Nahuel Huapi hacia la zona de Inalco, mientras allí se hospedaba el líder del Tercer Reich... A buen entendedor, pocas palabras: la Torre Bustillo... o ¿la puerta de entrada a Inalco?

La Torre Bustillo.

Ver también en este blog:
http://historiasladob.blogspot.com.ar/2012/03/residencia-inalco-la-casa-de-hitler-en.html

miércoles, 4 de abril de 2012

¿Qué hicieron los norteamericanos con el tesoro nazi?

Increíble hallazgo en la mina de potasio. (Foto: libro "El museo desaparecido" de Héctor Feliciano)


La segunda guerra mundial llegaba a su fin y los norteamericanos "casualmente" eran los protagonistas de un descubrimiento que, aún hoy, sigue dando que hablar. Vaya uno a saber de qué modo los principales generales del ejército norteamericano se fueron a enterar de la existencia de una secretísima mina de potasio ubicada a 800 metros de profundidad en cercanías del poblado alemán de Merkers.
El "descubrimiento espontáneo" del ejército de las barras y estrellas no hubiese tenido la menor importancia a no ser por un pequeño detalle: allí, en esa mina, se encontraba almacenado el mayor tesoro nazi jamás encontrado...

Tanto secreto oculto por los popes del nacional socialismo a través de los años, tanto recaudo tomado para proteger un tesoro sin igual, para que de buenas a primeras, los norteamericanos "tuvieran una visión del más allá" y se adentraran en las profundidades de la tierra para descender casi 700 metros en un sombrío ascensor hasta el fondo de la mina y descubrir las maravillas que allí se preservaban. Extraño. Por lo menos extraño...

 "Debatiendo" cuándo "restituír" el tesoro nazi... (Foto: libro "El museo desaparecido" de Héctor Feliciano)

Sea como sea, una vez allí dentro, tras elegir entre sus cinco secretas entradas y recorrer sus más de 50 túneles, Eisenhower y los suyos se toparon con lo inimaginable en las entrañas de la mina de Kaiseroda (tal como era conocido el lugar): 1.000 millones de marcos en casi 550 bolsas, 8.527 lingotes de oro, miles de monedas de oro francesas, suizas y de Estados Unidos, cargamentos  completos de diamantes, perlas y otras piedras preciosas e, inclusive, cantidades inimaginables de coronas dentales de oro robadas a las víctimas de los campos de concentración. Como si todo eso fuera poco, también se encontraron obras de arte robadas a más de 15 grandes museos europeos. Entre esas obras robas se destacaba particularmente el cuadro "Wintergarden" del famoso pintor Edouard Manet.

Arriba: el hallazgo del cuadro de Manet. Abajo: Eisenhower con cara de "acá no pasa nada..."
 (Foto: libro "El museo desaparecido" de Héctor Feliciano)


Los norteamericanos actuaron su mejor papel y se sintieron "sorprendidos" en la cueva de las maravillas.
El mayor tesoro nazi jamás encontrado había sido dejado allí por las tareas conducidas por el Dr. Fung, por entonces presidente del poderoso Reischbank. El operativo de traslado del tesoro hizo necesaria la utilización de trece vagones de tren...

Los norteamericanos declararon rápidamente que el tesoro sería "cuidadosamente" transportado a la sede del Reischbank en Berlín para luego comenzar una exhaustiva clasificación y su posterior restitución. Como tantas otras veces ha sucedido, entre el dicho y el hecho... hay un largo trecho y así las cosas, aún hoy, año 2012, la mayoría de esos tesoros esperan regresar a manos de sus auténticos propietarios...

Mmmmmmmmmm.... ¿quién se lo habrá quedado...? ¿Habrá sido ese tesoro el pago por algún otro servicio prestado...?

domingo, 1 de abril de 2012

Jean Marie Loret: "Soy el hijo de Hitler ¿qué debo hacer?"

Adolf Hitler y Jean Marie Loret

Un día de 1914 un grupo de campesinas francesas llevaban a cabo sus habituales tareas de recolección de paja al borde de una ruta cuando advirtieron del otro lado del camino a un joven soldado alemán que las observaba mientras disfrutaba de una jornada de descanso en la zona de Fournes-en-Weppe, cerca de la norteña ciudad de Lille. El joven soldado se llamaba Adolf Hitler, quien con sus papeles y lápices en mano (fruto de su pasión por el dibujo y la pintura), había conseguido obtener un permiso para descansar lejos del frente, mientras los germanos combatían a los franceses en la zona de Picardía.

El grupo de campesinas, curiosas, estableció que sería una de ellas quien se acercara al soldado alemán para averiguar de quien se trataba. La elegida se llamaba Charlotte Lobjoie, de 16 años de edad en 1914. Ese acercamiento dio lugar con el paso del tiempo a una relación sentimental que habría sido coronada con el nacimiento de un hijo. Jean Marie, el niño en cuestión, nació entre el 18 y el 25 de marzo de 1918 en Seboncourt (región de Picardía, Francia) y con el paso de los años no sólo se convirtió en un casi anónimo trabajador del ferrocarril, sino que de buenas a primeras paso a ser el "hijo de Hitler", clamando por el reconocimiento del apellido de su padre durante años.

Jean Marie Loret

El niño desde recién nacido fue rechazado por su progenitor y por sus compañeros, quienes lo trataban de "sucio alemán". Su madre, Charlotte, lo entregó un día a una familia sustituta, la cual extrañamente se instaló durante los años '20 en un cómodo departamento en Francfort (Alemania) sin ni siquiera haber invertido un centavo en el mismo... Adolf Hitler, recibía noticias de su "hijo" de tanto en tanto pero el lazo padre e hijo nunca llegó a consumarse.
Un buen día, Charlotte le dijo a su hijo: "Tu padre era Hitler" y de allí en más Jean Marie Loret (tal el apellido con el que vivió toda su vida) comenzó una cruzada destinada a ser reconocido finalmente como el hijo de Adolf Hitler, sin más vueltas y sin la más mínima intención de ocultarlo.

La obsesión de Jean Marie Loret por demostrar ser el hijo no reconocido de Hitler lo llevó a una frenética búsqueda e investigación, lo que incluyó interrogatorios a testigos de la época e investigaciones de fisonomía comparativa y estudios sanguíneos en el Instituto de Antropología y Genética en la Universidad de Heidelberg, tras los cuales la ciencia determinó que los dos hombres (Adolf Hitler y Jean Marie Loret) compartían el mismo grupo sanguíneo. Finalmente también solicitó análisis grafológicos y todo pareció darle de a poco la razón...
Un día golpeó la puerta del estudio de Francoise Gibault, un abogado de París, y al ser recibido, lanzó lo suyo: "Soy el hijo de Adolf Hitler... Dígame ¿qué debo hacer?"

Adolf Hitler en 1914 / Charlotte Lobjoie / Jean Marie Loret

Cuando la madre de Jean Marie Loret falleció, su hijo encontró (no con poca sorpresa) que en la casa había cuadros originales firmados por el mismísimo Hitler...(Hitler era un eximio pintor y dibujante).
Loret, vivió extrañamente los días de la segunda guerra mundial luchando contra los nazis en Francia y convirtiéndose en el agente "Clément" formando parte de la resistencia francesa.
Murió en 1985 en la ciudad de Saint-Quentin, Francia. Mientras tanto, el misterio en torno a su verdadera identidad sigue flotando en el aire...



miércoles, 28 de marzo de 2012

Un micrófono indiscreto entre Obama y Medvedev durante la Cumbre de Seguridad Nuclear


La Cumbre de Seguridad Nuclear realizada en Seúl, capital de Corea del Sur,  por estas horas podrá devenir en determinaciones que poco y nada mejorarán la vida de la gente común. Todo seguirá igual para un mundo que sigue viendo como los líderes del nuevo orden mundial hacen y deshacen a su antojo, casi como siempre ha sucedido...
Lo ocurrido entre Barack Obama, presidente de Estados Unidos, y su colega ruso, Dimitri Medvedev es una muestra más de la irresponsabilidad con la que muchos poderosos del mundo se toman las cosas y una clara demostración de lo poco que importan los habitantes del planeta.
El lunes 26 de marzo de 2012, instantes previos a que se "encendieran las cámaras" y pusieran su mejor cara de poker vomitando las típicas declaraciones formales de siempre, Obama y Medvedev no advirtieron que los micrófonos estaban abiertos... y entonces todos pudimos escuchar lo que se decían acerca del tema del escudo antibalístico, uno de los importantes temas tratados en la cumbre.

Este  ha sido el diálogo:
Obama: "Esta es mi última elección. Después de mi elección tendré más flexibilidad".

Medvedev: "Lo comprendo. Transmitiré esta información a Vladimir" (en referencia al presidente electo Vladmir Putin).

(Léase: "Hagamos una cosa y digamos otra... total, nadie nos escucha...")



La conversación fue grabada por la cadena televisiva norteamericana ABC.
Ahora sí, señoras y señoras... hagan sus preguntas Obama responderá oficialmente lo que todos quieren escuchar...

domingo, 25 de marzo de 2012

Un tibio llamado tras el asesinato de Robert Kennedy

Robert Kennedy ya mortalmente herido, sostenido por Juan Romero.

A las 12:15 hs. del 5 de junio de 1968 resonó un disparo en el pasillo que llevaba a la cocina del Hotel Ambassador, en la ciudad de Los Angeles. El pánico y la desesperación se apoderaron de los presentes en el lugar, quienes acababan de vitorear a Robert Kennedy apenas cuatro horas después de haberse consagrado en las elecciones primarias demócratas en California, cosa que le aseguraba el camino a la Casa Blanca.
El jefe de seguridad de Kennedy, era William Barry, un exagente del FBI, acompañado por otros dos guardaespaldas no oficiales (una custodia sugestivamente escueta para un futuro contendiente al sillón de  la oficina oval...). La gran cantidad de gente presente hizo que los planes de "evacuación" de Robert Kennedy se modificaran y el candidato demócrata optó por seguir al maitre del lugar por una salida que lo llevaría por la parte trasera.
Sirhan Sirhan, era un inmigrante palestino que logró escabullirse entre "tanta seguridad" y al acercarse a Kennedy, disparó en dos oportunidades las balas que se encontraban en el cargador de su revólver calibre 22 Iver-Johnson Cadet. El senador cayó pesadamente al suelo y Barry trató de consolarlo colocándole un abrigo debajo de su cabeza a modo de almohada. De inmediato Barry se percató del balazo en la cabeza y la gravedad de las heridas producidas... Varios lograron golpear y detener al asesino, mientras Juan Romero, un testigo "privilegiado" del hecho le sostenía la cabeza al infortunado Kennedy a punto de morir. La última pregunta de Kennedy se dejó escuchar: "¿Están todos bien?"... "Sí, todo va a salir bien" -le respondía Romero.

Lo que no iba a salir bien era el pedido de auxilio desde el hotel a la policía... Dos empleadas del Hotel Ambassador intentaron conseguir la llegada de la policía al lugar pero, del otro lado de la línea, la reacción dejó mucho que desear.
En el video a continuación, parte de las imágenes del asesinato y la grabación del sugestivo llamado telefónico... ¿Es que... había que dejarlo morir?



jueves, 22 de marzo de 2012

Conferencia de Yalta: el día que Roosevelt, Churchill y Stalin se repartieron del mundo

Churchill, Roosevelt y Stalin sonríen satisfechos tras repartirse el mundo en Yalta.

Yalta, península de Crimea, sur de Ucrania a orillas del mar Báltico. Febrero de 1945. La segunda guerra mundial estaba llegando a su fin, Adolf Hitler preparaba su escape disfrazado de suicidio y "Los Tres Grandes" se reunían para repartirse las pertenencias del difunto, cuando su cuerpo aún estaba caliente...
"Los Tres Grandes", como ellos mismos se hacían llamar, eran Winston Churchill (Primer ministro británico), Franklin D. Roosevelt (Presidente de Estados Unidos) y José Stalin (Dictador de la Unión Soviética) y se habían reunido con único y claro objetivo: repartirse el mundo de posguerra.
Atrás quedaban muchas de las atrocidades (propias y ajenas) de una de las peores guerras de la historia de la humanidad. Atrás quedaban las enormes diferencias aparentes en los campos de batalla entre más de uno de los tres protagonistas de esta reunión. No importaba ya si Stalin era un criminal con portación de poder absoluto, no importaba el cinismo y las mentiras constantes de Churchill y tampoco importaban los atropellos norteamericanos. Ese día, "Los Tres Grandes" estaban, en definitiva, delineando el "Nuevo Orden Mundial"...

Tras la conferencia de Yalta, los "vencedores" de la guerra determinaron entre otras cosas: una serie de acuerdos referidos a los nuevos límites de Europa, en especial los referidos a Polonia. También se decretó la creación de las Naciones Unidas, un organismo claramente hecho a medida y manejado por las potencias victoriosas y finalmente se determinó el "reparto" de Alemania, dividiendo al país en cuatro zonas, cada una dominada por tropas de Estados Unidos, Inglaterra, Francia y la Unión Soviética.

Pero por sobre todas las cosas, la reunión iniciadora del "Nuevo Orden Mundial" apuntaba a desactivar y desmembrar por completo al proletariado alemán, siempre tan proclive a ser el más ordenado y organizado de Europa...La "desnazificación" de Alemania era un buen pretexto para meter mano allí.
Resultará muy llamativa la tranza perpetrada por los líderes del comunismo y los amos capitalistas. Los aliados (que aunque suene increíble aún contaban en sus filas a Rusia...) acordaron dividir (repartirse) Europa en dos zonas de influencia: Europa oriental quedaba en manos de Stalin, quien se comprometió a mantener el capitalismo instalando gobiernos "de unidad nacional" en conjunto con las burguesías establecidas sin avanzar sobre la expropiación de bienes. Por el lado de Europa Occidental, todo quedaba bajo el ala norteamericana con el agregado de la reconstrucción de las zonas devastadas, también a cargo de Estados Unidos y sus empresas. Stalin por su lado se comprometió también a que los partidos comunistas de Francia e Italia frenaran automáticamente su lucha armada y colaboraran de alguna manera con la "reconstrucción" liderada por Estados Unidos y sus socios.
Con este impensado gesto, Stalin, desarticulaba absolutamente los incipientes procesos revolucionarios y obreros en esas zonas de Europa. Stalin firmaba de ese modo la "salvación" del capitalismo y se hacía cómplice (otra vez) de la "repartija mundial" que era la antesala de un nuevo negocio: la guerra fría.

martes, 20 de marzo de 2012

Martin Luther King y su último discurso contra... Coca-Cola

Martin Luther King durante su último discurso en Memphis.

El 3 de abril de 1968, Martin Luther King Jr. daba el último discurso de su vida en el principal centro de reunión de la "Iglesia de Dios en Cristo", Mason Temple (Memphis, Estados Unidos). El pastor estadounidense de la Iglesia Bautista llevaba adelante en los Estados Unidos una labor crucial al frente del Movimiento por los Derechos Civiles para los afroamericanos, además de expresarse en reiteradas oportunidades en contra de la guerra de Vietnam, la pobreza y la desigualdad fundamentalmente.
Martin Luther King Jr. no se desentendía de nada y no le importaba ser "políticamente incorrecto" llegando hasta el fondo mismo de los problemas que aquejaban por entonces a la racista sociedad norteamericana.

Entre los varios problemas que oprimían a los negros en los Estados Unidos estaban el trato, las condiciones de trabajo y las políticas de contratación de los mismos en la fábrica de Coca-Cola en Memphis (Sólo por nombrar uno...). Los trabajadores negros de la planta recibían un trato totalmente distinto al de los blancos y sus derechos, por supuesto, eran prácticamente inexistentes comparados con los de los "norteamericanos puros".

Esa noche, la del 3 de abril, en un pasaje de su (a la postre) último discurso, dedicó precisamente unos párrafos al gigante de la bebida efervescente.
Dijo en un momento Luther King:
"Y así, como resultado de ésto, te pedimos esta noche, salir y decirle a tus vecinos que no compren Coca-Cola en Memphis. Díles no comprar la leche Sealtes. Díles que no compren - ¿Cuál es el otro pan?... Wonder Bread. ¿Y cuál es la otra compañía de pan, Jesse (N. de R.: Jesse Jackson)? Diles de no a comprar el pan de Hart. Como Jesse Jackson ha dicho que, hasta ahora, sólo los pordioseros han estado sintiendo el dolor, ahora debemos redistribuir el dolor. Estamos eligiendo a estas empresas porque no han sido justas en sus políticas de contratación, y las estamos eligiendo porque pueden iniciar el proceso de decir, que van a apoyar las necesidades y los derechos de estos hombres que están en huelga". 

Martin Luther King se había metido con uno de los emblemas del poder norteamericano establecido. Al día siguiente, 4 de abril de 1968, mientras se encontraba en un balcón del Lorraine Motel, lugar en donde se hospedaba, un balazo terminó con su vida a las 18:01 hs. de aquella conmovedora jornada.
Las últimas palabras de Martin Luther King mientras agonizaba en el suelo fueron dirigidas al músico Ben Branch, quien iba a presentarse esa misma noche en una reunión a la que también asistiría King: "Ben, prepárate para tocar "Precious Lord, Take My Hand" (Señor, toma mi mano) en la reunión de esta noche. "Tócala de la manera más hermosa".

El poder real de los Estados Unidos tenía (según su criterio) a partir de ese momento un problema menos.


lunes, 19 de marzo de 2012

Las profecías de San Malaquías y el último Papa: Pedro el Romano está entre nosotros


Profecías. Visiones. Lemas que adelantaban lo que estaba por venir. San Malaquías, un arzobispo católico irlandés de la ciudad de Armagh, que vivió entre los años 1094 y 1148, hizo gala y gran manejo de todas esas cosas y dejó para este mundo una serie de frases que muchos consideran proféticas.
Las profecías de San Malaquías están allí, soportando el paso de los años y confirmándose año tras año, dejando sin habla y sin aliento a más de uno. ¿Y sobre qué profetizaba San Malaquías para que debamos prestarle tanta atención?... de los Papas de la Iglesia Católica Apostólica Romana, ni más ni menos.

San Malaquías adelantó por escrito los nombres, procedencias y destinos de todos y cada uno de los Papas católicos comenzando con Celestino II en el año 1143 y culminando sus profecías con el Papa que sucedería a Benedicto XVI. La curiosidad sobre las profecías de San Malaquías es que al hablar del Papa que sucederá a Benedicto XVI, dice que ese será el Sumo Pontífice que manejaría los destinos de la Iglesia y presenciará su final. Muchos interpretan a esta afirmación como el final de la Iglesia como institución terrenal, mientras que otros creen que en realidad se habla del fin del mundo. Día a día cobra más fuerza la primera de las hipótesis.

Veamos que dijo San Malaquías. El Santo católico hizo referencia a 112 Papas en total y, hasta ahora, en todos y cada uno de los casos, acertó. Precisamente el relato 112 de sus profecías, hace referencia al Papa que sucederá en el trono Vaticano a Benedicto XVI, diciendo lo siguiente:
“In psecutione extrema S.R.E.sedebit. (S.R.E. = Sacræ Romanæ Ecclesiæ) Petrus Romanus, qui pascet oues in multis tribulationibus: quibus transactis ciuitas septicollis diruetur, & Judex tremedus iudicabit populum suum. Finis.”

El texto original en latín traducido al castellano reza lo siguiente:
“Durante la persecución final de la Santa Iglesia de Roma reinará, Pedro el Romano, quien alimentará a su rebaño entre muchas tribulaciones; tras lo cual, la ciudad de las siete colinas [Roma] será destruida y el Juez Terrible juzgará al pueblo. Fin.”

Como se ve, San Malaquías hace referencia a un último Papa que vivirá días penosos y de grandes tribulaciones que marcarán el fin y nombra a un "Pedro el Romano", del que mucho se habla pero del que muy poco se sabe. Hasta ahora. ¿Quién es Pedro el Romano? Los teóricos más simplistas dicen que Malaquías lo nombra como Pedro simbólicamente para llamar al supuesto último Papa de todos los tiempos del mismo modo que al primero (San Pedro), mientras que lo de "Romano" lo hace en referencia a su lugar de residencia o, si se quiere, reinado, en Roma. la ciudad eterna. Pero en realidad la explicación es más compleja, no tan obvia, aunque no por eso menos sorprendente y reveladora...

Pedro el Romano está en este mundo. Está entre nosotros. Existe. Vive en Roma y es además la mano derecha del actual Papa Benedicto XVI. Unos pocos lo conocen como Tarcisio Bertone (en la foto junto a San Malaquías), pero su nombre completo es en realidad Tarcisio Pietro Evasio Bertone, nacido el 2 de diciembre de 1934 en la ciudad de Romano Canavese, en la provincia de Turín. De modo que este hombre se llama "Pedro" (Pietro en italiano) y nació en Romano Canavese, o sea que es "Romano". Él es "Pedro el Romano".

El Cardenal Tarcisio Pietro Evasio Bertone es desde 2006 el Secretario de Estado del Vaticano, es decir, una especie de Primer Ministro del Estado Vaticano, la mano derecha del Papa y la persona que maneja dadas sus responsabilidades todas las funciones políticas y diplomáticas de la Santa Sede. "Pedro el Romano" es además, desde 2007, el Camarlengo de Benedicto XVI, lo que significa que es la persona encargada de acompañar al Papa en su lecho de muerte y anunciar oficialmente la noticia de su deceso al Estado Vaticano y al mundo entero. Un puesto de mucha importancia dentro de la Iglesia y un lugar desde donde puede ser catapultado hacia el trono del Vaticano sin escalas ni obstáculos instantes antes de la muerte del actual Papa, cuando éste (Benedicto XVI) pueda llegar a entregarle su anillo papal marcándolo como su sucesor (aunque después se concrete "por pura formalidad" un Cónclave destinado a "elegir" al nuevo Sumo Pontífice).

Si Tarcisio Pietro Evasio Bertone será o no el futuro (¿y último?) Papa de la Iglesia, eso ya se verá. Tal vez los Cardenales que participen del próximo Cónclave para elegir (llegado el momento) al sucesor de Benedicto XVI, quieran cambiar el rumbo, hasta ahora absolutamente certero, de las profecías de San Malaquías y voten por otro... o no...

Finalmente, vemos un reporte hecho por RomeReports, con una semblanza de "Pedro el Romano"...


Como broche, algunas de las profecías de San Malaquías, tomando desde la 107 a la 112, referidas a los últimos Papas (fuente: http://www.corazones.org). Estas profecías hablan desde Juan XXIII hasta el supuesto último y las coincidencias en cada caso nos deberían dejar pensando...

# 107: “Pastor y nauta” (Pastor y navegante). Juan XXIII (1958-1963). Juan XXIII fue Cardenal de Venecia, ciudad de navegantes. Condujo la Iglesia al Concilio Vaticano II.
# 108: “Flos florum” (Flor de las flores). Pablo VI (1963-1978). Su escudo contiene la flor de lis (la flor de las flores). 
# 109: “De medietate Lunae” (De la Media Luna). Juan Pablo I (1978-1978). Su nombre era “Albino Luciani” (luz blanca).  Nació en la diócesis de Belluno (del latín bella luna). Fue elegido el 26 de agosto del 1978. La noche del 25 al 26 la luna estaba en “media luna”. Murió tras un eclipse de la luna. También su nacimiento, su ordenación sacerdotal y episcopal ocurrieron en noches de media luna.
# 110: “De labore solis” (De la fatiga o trabajo del sol). Juan Pablo II (1978-2005). Ha sido capaz de un trabajo extraordinario y extenso. Los días de su nacimiento y muerte hubo eclipses solares.
# 111:  “Gloria Olivae” (La gloria del olivo). Benedicto XVI (2005). Toma su nombre por San Benito y Benedicto XV. Los Benedictinos tuvieron una rama llamada los "olivetans". Benedicto XV se destacó por sus esfuerzos por la paz durante la Primera Guerra Mundial.

Queda uno solo en la lista:
# 112:  “Petrus Romanus” (Pedro Romano). Quién será el último Papa ya que en su reinado ocurrirá el fin: 
"En la persecución final de la Santa Iglesia Romana reinará Petrus Romanus (Pedro el Romano), quien alimentará a su grey en medio de muchas tribulaciones. Después de esto la ciudad de las siete colinas será destruida y el temido juez juzgará a su pueblo. El Fin."

Dios dirá...

domingo, 18 de marzo de 2012

El día que los norteamericanos simularon buscar a Hitler

Foto superior: la 3ª divisón de Infantería norteamericana celebra la destrucción del Berghof. 
Foto inferior: Hitler y amigos en la misma terraza y con las mismas montañas de fondo.

El día que los rusos entraban en Berlín convencidos de poder encontrar a Adolf Hitler, los aliados miraban para otro lado y dejaban al ejército rojo con el dudoso privilegio de salir en la foto de la "no captura" del Führer. Semejante esfuerzo en pos de eliminar a Hitler y todo lo que representaba para que finalmente decidieran no ir a Berlín a buscarlo y dirigirse en cambio al Berghof ubicado en Berchtesgaden, el refugio alpino del dictador, conocido también como el "Nido del Aguila".
Los rusos "compraron" la idea que les tiraron sobre la mesa los norteamericanos: ir a Berlín, capturar a Hitler y salir en la foto como los salvadores del mundo contra la tiranía (como si Stalin no fuera un dictador). Pero la "providencia" quiso que los rusos nunca encontraran a Hitler en Berlín, mientras que los aliados (con los norteamericanos a la cabeza) se divertían en el Berghof bombardeando y derrumbando todo lo que encontraban a su paso, previo saqueo del lugar.
Si los norteamericanos creyeron realmente que Hitler iba a cometer la torpeza de "esconderse" allí, habrían pecado de inocencia galopante, pero... en realidad no sólo no lo creían, sino que además sabían perfectamente que Hitler no estaba en el lugar.

El "Nido del Aguila" antes y después de su destrucción.

De esa manera los aliados se "evitaban" el problema de atrapar a Hitler y dejaban en exposición a los rusos ante el mundo como los únicos responsables de no encontrarlo y, como si fuera poco, permitir que de un modo u otro logre escapar. Extraña (o no tanto) la actitud oficial de norteamericanos e ingleses de dejar entrar a Berlín a los rusos mientras que ellos se dedicaban a destruír la fortaleza inexpugnable de Hitler en Los Alpes.

Mientras el mundo respiraba con alivio por el suicidio y la posterior captura del cadáver de Hitler en Berlín, los aliados y los cerebros de la organización Odessa ya se frotaban las manos a sabiendas de la protección de la que gozaba el líder del Tercer Reich, destinado a durar mil años. Los lingotes de oro del tesoro de Hungría que Hitler había enviado a la estación de trenes de Linz (en dos vagones completos) ya estaban en camino a las arcas norteamericanas, al tiempo que los aliados con la 3ª División de Infantería norteamericana distraían al mundo entero el 22 de Junio de 1945 destruyendo la residencia montañesa de Hitler. Mientras tanto, los rusos se seguían preguntando: "pero...¿Nos han tomado por idiotas?". Todo parece indicar que sí...

La misma habitación del Berghof en su máximo esplendor y tras los bombardeos aliados.

¿Había que dejar escapar a Hitler?... ups... sí.

jueves, 15 de marzo de 2012

Los perros rusos cazatanques

Un perro cazatanque a punto de cumplir su cometido...

La segunda guerra mundial está plagada de historias increíbles, muchas de las cuales no han sido protagonizadas por grandes (y no tan grandes) personalidades que han pasado a la historia, para bien y para mal. En este caso ponemos el foco en los anónimos perros rusos que eran utilizados como verdaderos "cazatanques" por el ejército rojo, sobre todo durante la llamada "Operación Barbarroja", es decir la invasión de las tropas del Tercer Reich a la Rusia comunista.
Los perros cazatanques llevaban una carga de explosivos sobre su lomo o los laterales, con un dispositivo ubicado a modo de palanca que sobresalía por la parte superior. Estos perros estaban entrenados para meterse debajo de los tanques blindados alemanes y una vez que lo hacían, se accionaba la palanca que llevaban sobre su lomo activando de inmediato el letal explosivo.
Mediante esta increíble maniobra, los rusos han hecho verdaderos desastres en el ejército alemán, llegando a contabilizarse en una oportunidad la destrucción de nueve tanques y otros dos carros blindados durante la misma jornada en la ciudad ucraniana de Izyum.
Lo "pintoresco" del caso de los perros cazatanques es que es sabida la paranoia que provocaba en los soldados alemanes el hecho de sentir ladridos de perros al avanzar. Los soldados del Tercer Reich sabían que a medida que avanzaban raudos y escondidos en sus infernales máquinas de guerra, los ladridos de esos perros significaban su inexorable muerte...

martes, 13 de marzo de 2012

Wilfred von Oven: secretario de Joseph Goebbels y vecino de Buenos Aires hasta 2008

Wilfred von Oven a sus 96 años en Buenos Aires (izquierda) y vistiendo su uniforme en los días de la guerra (derecha).

Para todos aquellos que descreen sistemáticamente de la presencia y buena vida de los nazis de la segunda guerra mundial en la Argentina (o simplemente pretenden mirar hacia otro lado), el caso de Wilfred von Oven es un baldazo de agua fría. Este alemán que en sus años mozos era delgado, esbelto y prolijo (en su aspecto), nacido en La Paz, Bolivia, el 4 de mayo de 1912, se adhirió al Partido Nacional Socialista y fue parte de las SA (Camizas Pardas) hasta darse de baja de la "insitución" y pasar a actuar arma en mano en la "Operación Barbarroja", la invasión alemana a Rusia en 1941, como integrante de las divisiones Panzer de la Wehrmacht.

Las vueltas de la vida, quisieron que a Joseph Goebbels se le ocurriera la idea de hacer que algunos integrantes del ejército alemán en las diferentes campañas de conquista se convirtieran en cronistas en el campo de batalla además de ser soldados. Eran las llamadas "tropas de información" y von Oven se destacó más que otros en esa tarea de redactar informes y crónicas directamente desde el lugar de los hechos. A Goebbels (y dicen que también a Hitler) le llamó la atención uno de los informes de von Oven y decidió llamarlo para recompensarlo. Ese "regalo" de Goebbels se materializó con la salida de von Oven del durísimo e inclemente frente ruso y su traslado directo a Berlín para comenzar a cumplir las funciones de auxiliar directo (concretamente: secretario) del siniestro Ministro de Propaganda del Tercer Reich. La relación de von Oven y Goebbels fue de lo más cordial y de mutua admiración, teniendo su último episodio en la capital alemana el 22 de Abril de 1945 cuando Goebbels se despidió de von Oven para ir junto a Hitler al bunker subterráneo de la Cancillería.

Von Oven intentó seguir a Goebbels a la Cancillería pero el ministro nazi le dijo que permaneciera en su oficina "arreglando todos los papeles". Luego el final de la guerra y un poco después, la llegada de Wilfred von Oven a la Argentina amparado por las autoridades de turno y siendo parte de los contingentes de nazis "puestos a salvo" por una impresionante red internacional. Wilfred von Oven fue prisionero de los ingleses hasta 1952, año en el cual se trasladó a Argentina con la primera de sus tres esposas (enviudó tres veces el hombre...) y sus dos hijos. Von Oven inicialmente tuvo la esperada protección, lo que implicaba una identidad falsa en sus documentos y luego, siguió contando con esa misma protección, sólo que a partir de cierto momento con la ayuda de la impunidad: al poco tiempo de llegado a la Argentina volvió a usar su verdadero nombre y nunca nadie, jamás, le tocó un pelo... Con ese mismo nombre, firmaba su trabajo en Argentina como jefe de redacción del periódico alemán "Freie Presse".

Extracto de entrevista a Wilfred von Owen en Bella Vista (Buenos Aires, Argentina, 2008). Impunidad total. Sin palabras...

Esta mano derecha de Goebbels vivió en Argentina, en un chalet ubicado en Bella Vista, Gran Buenos Aires, desde 1952 hasta el 13 de Junio de 2008, momento en el que falleció a los 96 años, solitario, rodeado de hijos, nietos y bisnietos, llevándose a la tumba los recuerdos y secretos de aquellos nefastos y oscuros días de Nacional Socialista en la Alemania del Tercer Reich. Vivió plácidamente en la Argentina, amparado, protegido, avalado y (por muchos, increíblemente) respetado y admirado. No fue el único, eso es lo peor.
 

lunes, 12 de marzo de 2012

La pista inglesa: ¿Churchill mandó matar a Mussolini?

Cuerpos de Mussolini y su esposa (segundo y tercero desde la izq.) y Churchill.

Lo maquiavélico de ciertos actos perpetrados por Winston Churchill, primer ministro británico durante los oscuros días de la segunda guerra mundial, no siempre han ocupado la primera plana de los diarios y mucho menos han sido los que más se han destacado en los relatos que hablan de lo que hizo o lo que dejó de hacer ese hombre que goza de gran reputación en la "historia oficial". Churchill no era un santo, Nadie lo es, por supuesto, pero el caso del mandamás inglés es muy particular dado que ha pasado a la historia como un hombre impoluto y carente de toda hilacha capaz de hacerlo tambalear en la memoria colectiva.
Así como ha quedado demostrada la trampa que Churchill le tendió a Rudolf Hess en 1941 haciéndole creer que efectivamente estaban llevando a cabo tratativas de paz (ésto es algo penado como crimen de guerra), ahora sale a la luz otro hecho que pone de manifiesto lo sistemático del uso de la mentira y el ocultamiento de parte de Churchill en su accionar.

Durante muchos años se ha creído que la muerte del Duce, Benito Mussolini, y su mujer Clara Petacci había sido entera responsabilidad de partisanos italianos furiosos con el rabioso dictador. Los libros de la historia oficial, el Lado A, dicen eso y así quedará registrado para todos los tiempos. Algo de verdad hay en eso, sin embargo hace poco se han dado a conocer las declaraciones de un partisano de entonces, quien además escribió un libro en 1978 llamado "Aquel 28 de Abril" (N. de la R.: fecha de la muerte de Mussolini), quien asegura que ha sido él mismo quien disparó contra el fascista dictador italiano. Bruno Giovanni Lonati (en la segunda foto de la nota), era el comisario político de la 3ª Brigada Partisana "Garibaldi" y afirma sin temor a equivocarse que los hechos no han sido tal como se escribieron en la historia hasta ahora conocida.

Bruno Giovanni Lonati (laprovinciadilecco.it)

La versión de Bruno Giovanni Lonati apunta directamente a seguir la llamada "pista inglesa" y hace concreta referencia a que el cerebro tras la solicitud de asesinato de Mussolini, no ha sido otro más que el propio Winston Churchill. Los motivos no serán difíciles de encontrar: tanto Churchill como Mussolini compartían un sentimiento imposible de ocultar, su profundo odio al comunismo. Dada esta situación entre ambos, se sabe que Churchill mantuvo durante largo tiempo una fluída comunicación con el Duce a través de cartas personales y cuando el final llegó inexorable para el líder italiano, Churchill creyó conveniente no sólo eliminarlo sino también deshacerse de la tan conflictiva correspondencia entre ambos.
Aquel 28 de Abril de 1945, todo se habría dado de "maravillas" para Churchill. Mussolini siempre viajaba con una valija cargada de su correspondencia más secreta y confidencial, también (obviamente) las cartas de Churchill. En aquella jornada se dio la chance de exterminar todo de un plumazo: Mussolini, su mujer y las cartas comprometedoras para el flemático y duro primer ministro inglés. Todo fue destruído.

Bruno Giovanni Lonati, finalmente, tenía algo más para agregar: si bien él efectivamente era un partisano y había disparado contra Mussolini, la orden de ejecución contra el dictador se la dieron directamente agentes del servicio secreto británico.

domingo, 11 de marzo de 2012

El abrazo entre Eisenhower y Franco: el aval del "mundo libre" a la dictadura española

El obseno abrazo entre Eisenhower y Franco en la base aérea de Torrejón.

El 21 de diciembre de 1959 quedará por siempre grabado en la memoria como un día en el que el por entonces presidente de Estados Unidos, Dwight D. "Ike" Eisenhower y el dictador español Francisco Franco, se fundieron en un abrazo que dejó perplejos a propios y a extraños. Atrás quedaban el ostracismo y el oprobio de 1945. Para los norteamericanos, defensores de la libertad de los pueblos, poco y nada tuvieron que ver todas y cada una de las acciones de un Franco que supo ser aliado incondicional de Adolf Hitler durante la segunda guerra mundial. El presidente del "mundo libre" llegó a España sin ocultar un entusiasmo tan incomprensible como obseno. "Ike", tras bajar del avión,  se despachó con un discurso que como resumen dejó sus palabras de satisfacción "por cumplir uno de sus sueños. Llegar a España..."

Tras una breve visita que reunió a más de 500 periodistas (entre extranjeros y españoles), 10 autobuses para comitivas, 15 cabinas de transmisión para los medios de comunicación, 110 aparatos telefónicos para comunicar "la buena nueva" al mundo entero, siete líneas para fototelegrafiar, centenares de cámaras de televisión de los medios mundiales y a casi 1 millón y medio de españoles vitoreando el encuentro, el presidente norteamericano y el caudillo dictador español se abrazaron al pie de la escalinata del avión en la base aérea de Torrejón, cerca de Madrid, para sellar lo impensado: el formal apoyo de los Estados Unidos a la más sangrienta y feroz dictadura de la historia española.
Si faltaba alguna otra prueba para demostrar que Francisco Franco se había salido (parcialmente) con la suya, ahora los hechos se encargaban de eliminar la duda: España lograba cambiar el aislamiento al que había sido sometida desde finales de la segunda guerra mundial, por una complicada y dudosa integración al sistema diplomático, militar y (por supuesto) económico de occidente.

No importaba ya si Franco había apoyado a Hitler. No importaba si la nación que dice defender los derechos humanos en cada rincón del planeta hacía la vista gorda ante las atrocidades franquistas de la España de entonces. No importaba nada. Después de todo, al fin y al cabo, los Estados Unidos (de siempre) y la España (de Franco) estaban firmemente unidas por algo: su desbocada y frenética lucha contra el comunismo.

Para España llegaron grandes cambios que difícilmente puedan opacar lo obseno del encuentro: España logró entrar en la Organización mundial de la Salud, la UNESCO y la OIT, entre otras cosas. Rápidamente y tras este aval norteamericano a la dictadura de Franco, España viró bruscamente de una economía agrícola a una decididamente industrial. España también logró su ingreso al Fondo Mundial Internacional, el Banco Mundial y la Organización para la Cooperación Económica Europea y finalmente logró mostrar "orgullosa" al mundo como su tasa de crecimiento anual real llegaba al 7% y cómo ingresaba al círculo "exclusivo" de los países con una renta por habitante superior a 2.000 dólares.
España quedó dividida una vez más (como si ya no lo estuviera). Tristemente dividida, entre los aduladores de las "supuestas mejoras económicas y el atropello al otro" y los españoles que aún soñaban con una patria en donde el respeto, la dignidad humana, la libertad y la unidad real fueran algo posible.

La poco decorosa memoria siempre tan selectiva norteamericana, una vez más exhibida en la máxima expresión. Los planes de eternizarse en el poder ilegítimo que ostentaba, vilmente utilizados como centro de la cáscara que pretendía mostrar un amor incondicional por España por parte de Franco, también elevados a la máxima potencia.
Ese abrazo, obseno y prepotente, entre Eisenhower y Franco, les costó caro a los españoles. Muy caro.

jueves, 8 de marzo de 2012

Thomas Watson y el Holocausto: Cuando Hitler quiso una lista de los judíos, IBM le mostró cómo hacerla

Adolf Hitler dialoga con amigos. A su izquierda, Thomas Watson, fundador de la IBM.

Thomas Watson empezó a hacer sus primeras armas en el mundo de los negocios como un modesto vendedor ambulante de máquinas de coser y pianos. Sabor a poco para alguien que años después esgrimiría como frase de cabecera que "si uno quiere ser mañana una gran empresa, debe empezar hoy mismo a actuar como si lo fuera". El camino ascendente de Watson en los negocios, comenzó en realidad en 1895, cuando contando con 21 años de edad, se unió a una de las compañías más rapaces de entonces, la NCR (National Cash Register), una empresa fabricante de máquinas registradoras. Durante más de 17 años Watson hizo de todo para convertirse en el vendedor estrella de la compañía, sin dudar a la hora de utilizar los métodos más bajos y viles para eliminar a la competencia, tales como incendios de locales, sobornos, utilización de patotas para intimidar, etc. En 1912 Watson y los suyos fueron acusados formalmente por el gobierno por conspiración criminal para restringir el comercio y establecer un monopolio. El monstruo se estaba gestando.

Años más tarde Watson renunció a su cargo en NCR y se unió a Charles Flint, presidente de la CTR (Compañía Tabuladora Registradora). Flint era otro conspícuo personaje sin escrúpulos que, además de haber sido uno de los primeros norteamericanos en tener un auto, se dedicaba a comerciar armas y buques simultáneamente a países que eran enemigos entre sí, como por ejemplo Japón y Rusia o Chile y Perú entre otros. Junto a Flint, Watson, también aprendió a perfeccionar el sistema de "Trust", por medio del cual a través de combinaciones empresarias y maniobras secretas destruían literalmente a la competencia. Thomas Watson era paternalista y fundamentlmente autoritario, incluso llegando a obligar a sus empleados el modo en que debían vestirse (con trajes negros y camisa blanca) y también ordenando que se componga una canción en su nombre para recibirlo en la empresa. El monstruo seguía creciendo...

A partir de 1924 cambió el nombre de CTR por el de IBM (International Business Machines) y desde entonces ya nada sería igual. Ni para él ni para muchos otros.
Entrada ya la década del '30, Watson comenzó a viajar asiduamente a Alemania, cosa que se hizo de manera regular y sistemática entre 1933 y 1939. La amistad y admiración mutuas entre Watson y los principales jerarcas del Partido Nacional Socilista, Hitler a la cabeza, hizo que entre otras colaboraciones Watson y la IBM llevaran adelante el censo de Alemania en 1933. Los datos arrojados por el censo y el pormenorizado trabajo de IBM le permitieron a Hitler contar con el primer listado completo de todos y cada uno de los judíos de Alemania. IBM siempre había sido presentada por Watson como "una compañía de soluciones". Hitler, por supuesto buscaba esas "soluciones" (finales) y Watson estaba empezando a dárselas.

La máquina Hollertih y Thomas Watson.

La eficiencia de Watson hizo que Hitler lo condecorara a través de Hermann Göering, premiándolo con la Cruz al Mérito del Aguila Germana, la máxima distinción del Tercer Reich para personalidades extranjeras (como Henry Ford, por ejemplo). Pero ese entusiasmo mutuo no se detendría allí, sino que eso sería el comienzo de la puesta en marcha de una infernal y siniestra maquinaria en la que los dos, Thomas Watson y Adolf Hitler eran los principales engranajes. Watson, ni bien empezada la segunda guerra mundial, buscó a través de intermediarios, que las más avanzadas máquinas de tabulación de tarjetas perforadas llegaran al Tercer Reich y de ese modo ofreció nuevamente "soluciones" a Hitler. Desde entonces la filial alemana de IBM, la Deustche Hollerith Maschinen Gesellshaft (Dehomag), diseñó y perfeccionó un complicado sistema de entrecruzamiento de datos, direcciones, cuentas bancarias, orígen etc. de los judíos de Alemania a través de las tarjetas perforadas Hollerith pero adaptadas a sus nuevas necesidades. De este modo es que Hitler comenzó a "automatizar" la persecución de judíos, gitanos, religiosos y otros inadaptados sociales (según su punto de vista), para después poder confiscar sus bienes, deportarlos, utilizarlos como mano de obra esclava o bien confinarlos en los campos de concentración de manera mucho más sencilla y efectiva.

Esas mismas tarjetas perforadas se utilizaban en los campos de concentración. Al ingresar cada prisionero recibía un número de identificación Hollerith. Las tarjetas eran rectangulares, de trece centímetros de largo y 8 de alto, estando divididas en columnas numeradas con perforaciones en cada hilera. Había en total 16 diferentes categorías de tarjetas según la ubicación de las perforaciones, estando asignados números según el tipo de prisioneros. Así, los judíos tenían el número 8. los homosexuales el 3, los gitanos el 12 y los "antisociales" el 9, sólo por nombrar a algunos. Dado ésto, podemos decir que estas tarjetas eran ni más ni menos que códigos de barras para seres humanos.

La tarjeta perforada Hollertih.

Al respecto el escritor Edwin Black, autor del libro "IBM y el Holocausto" ha dicho de manera magistral que: "cuando Alemania quiso una lista de los judíos, IBM le mostró cómo hacerla".

Watson, sin embargo, seguiría mostrando la hilacha. Ni bien ingresados los Estados Unidos a la segunda guerra mundial, devolvió la condecoración entregada por Hitler, intentando comenzar a limpiar su prontuario.
La historia dice además que ningún ejecutivo de la IBM fue llevado por los aliados al banquillo de los acusados en los juicios de Nuremberg.
Watson, tras finalizar la guerra, descubrió no con poca satisfacción que la fábrica de IBM en Alemania no había recibido ni un rasguño ni de parte de los bombardeos alemanes ni del lado de los aliados. Zona protegida.
El magnate empresario norteamericano también encontró una muy buena manera de demostrar su cinismo al finalizar la contienda, ofreciendo sus servicios y "soluciones" a los aliados para participar con IBM en la sistematización de la reconstrucción de las zonas devastadas por la guerra.
El sistema de las tarjetas Hollerith, aunque con las lógicas actualizaciones, ha sido el mismo utilizado en las controvertidas y fraudulentas elecciones presidenciales de los Estados Unidos del año 2000 en las que resultó sugestivamente triunfador (en medio de denuncias de fraude) George W. Bush.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Buenos Aires, 1938: el mayor acto nazi fuera de Alemania celebrando la anexión de Austria al Tercer Reich


Tras el ataque de la Alemania nazi provocando la anexión de Austria al Tercer Reich, el 12 de marzo de 1938, las reacciones en Argentina no se hicieron esperar. Los hitleristas nazis (entre los que había alemanes y austríacos argentinos) identificados como el "Landesgruppe" se congregaron en el Club Alemán de Buenos Aires (Argentina), donde reunieron a 3.500 personas, con la intención de sumar a los simpatizantes del Nacional Socialismo vernáculo al plebiscito organizado por Adolf Hitler para avalar la anexión austríaca al Tercer Reich (Anschluss). No lo lograron, pero siguieron con sus intentos y finalmente sorprendieron al mundo con un impresionante acto celebrado en el Luna Park de Buenos Aires, uno de los centros de reunión más importantes (incluso hoy en día) de la Argentina.
El hecho tuvo lugar en el emblemático lugar de la Capital Federal el 10 de abril de 1938, contándose la asistencia de 20.000 personas con gran despliegue de banderas argentinas y emblemas del Tercer Reich con cruces esvásticas y estandartes, en el que fue el mayor acto celebrado por el nazismo fuera de las fronteras de Alemania en toda su historia.


Al acto nazi asistieron en aquella (tristemente célebre) jornada, el gobernador de la Provincia de Buenos Aires; Manuel A. Fresco y el ministro de gobierno, Roberto J. Noble, quien en 1945 sería el fundador del Diario "Clarín". Fresco y Noble eran notables simpatizantes del nazismo y las potencias que conformaban el Eje y entre sus más destacadas acciones de gobierno se destaca la clausura en 1937 de las escuelas obreras judías existentes a lo largo y a lo ancho de la provincia de Buenos Aires. Por otro lado, tanto Fresco como Noble eran quienes más apoyaban a los grupos de choque fascistas que merodeaban por la Capital Federal en zonas de alta población judía.

Las fotos de la época son por demás elocuentes. El inmenso lugar, en pleno Buenos Aires, y a la vista de todos, "vestido de fiesta nazi" provocadora, insensible y repugnante.